Este lunes, la República Bolivariana de Venezuela expresó su rechazo a las falsas acusaciones realizadas por la supuesta Misión Internacional de Determinación de los Hechos, en un documento presentado ante el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
En un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores del país latinoamericano alertó sobre el doble rasero en el uso de los derechos humanos como arma ideológica y política, «para socavar la soberanía de aquellos Estados que no se someten a los designios de control hegemónico anhelado por algunas potencias».
#Comunicado | Venezuela repudia acusaciones falsas de supuesta Misión Internacional en panfleto presentado ante la ONU#FronteraDePazhttps://t.co/ULwnPDMwDS
— Cancillería Venezuela 🇻🇪 (@CancilleriaVE) September 26, 2022
El texto señala que dicho informe carece de sustento metodológico y contacto con la realidad venezolana, y forma parte de «la estrategia criminal de ‘cambio de régimen’ que se impulsa desde el gobierno de los Estados Unidos de América (EE.UU.), con la complicidad de sus gobiernos satélites en el mundo».
Asimismo, la Cancillería venezolana acotó que dicha Misión Internacional fue creada en 2019 «a partir de una cuestionada resolución promovida por un reducido grupo de gobiernos con graves situaciones internas de violación de derechos humanos».
En ese sentido, Venezuela enfatizó «su absoluto desconocimiento a este tipo de mecanismos paralelos, bárbaros e injerencistas que, a través de sus pronunciamientos, aúpa y alienta a los sectores más extremistas a reincidir en la violación masiva de los derechos humanos de los venezolanos y la desestabilización del país», expone el comunicado.
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Cooperación y principios
«La República Bolivariana de Venezuela es un Estado democrático y social, de Derecho y de Justicia, que asume la promoción, respeto y protección de los derechos humanos como un valor superior de su ordenamiento jurídico y de la actuación de sus instituciones, en plena consonancia con sus compromisos internacionales en esta materia», reza el texto.
En consecuencia, el Estado venezolano anunció que «tomará las medidas políticas y diplomáticas pertinentes, en el ámbito bilateral y multilateral, frente a cualquier intento de seguir prolongando el mandato de este mecanismo de agresión».
Finalmente, Venezuela ratificó su disposición a cooperar con el Consejo de Derechos Humanos, «sobre la base del estricto apego a los principios de objetividad, no selectividad, imparcialidad, no injerencia en los asuntos internos, respeto al multilateralismo y diálogo constructivo».
