El Gobierno de Venezuela expresó su rechazo a las declaraciones del jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell en las que aseguró que la Misión de Observación será la que legitime o deslegitime el proceso electoral venezolano.
“Estas declaraciones revelan la pretensión injerencista de utilizar la Misión de Observación electoral de la Unión Europea en beneficio de una parcialidad política”, denunció el Ejecutivo venezolano en comunicado emitido este viernes.
Advierte que “una Misión de Observación electoral de estas características no será aceptada por nuestro país” y enfatiza que “la legalidad o legitimidad del proceso electoral venezolano no depende, ni dependerá de ningún actor extranjero”.
Otra de las críticas contra el funcionario europeo fue el señalamiento hecho en torno a su apoyo a la oposición al señalar que el objetivo de esta misión era “acompañar a la oposición” y brindarle “mayor garantía”.
“La República Bolivariana de Venezuela exige a los representantes de la Unión Europea abstenerse de manipular políticamente la Misión de Observación electoral”, apunta.
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