Un tribunal de Noruega negó la petición de libertad condicional a Anders Breivik, considerado uno de los terroristas más peligrosos de la historia moderna.
Desde 2012, Breivik, de 42 años, cumple una condena de 21 años de cárcel, que puede ser prologada de manera indefinida, esto por asesinar a ocho personas en el centro de Oslo y a otras 69 en un campamento juvenil de verano del Partido Laborista de Noruega.
De acuerdo con la legislación del país nórdico, el sentenciado tenía derecho a solicitar una liberación anticipada después de cumplir 10 años en prisión, el mínimo fijado en su sentencia.
Pero la solicitud fue rechazada por estimaciones de un psiquiatra que examinó al terrorista y concluyó que aún tiene pensamientos elevados sobre sí mismo y carece de la capacidad de mostrar remordimiento y empatía hacia sus víctimas.
“Sigue queriendo cambios radicales en la sociedad y quiere trabajar activamente por sus puntos de vista», indica el dictamen hecho por el tribunal citado por Sputnik.