Un saldo de un fallecido y más de 5.000 personas hospitalizadas, es el resultado de la gran tormenta de arena que afectó este miércoles a Irak, informó el portavoz del Ministerio de Salud, Saif Al Badr, mientras apuntó que Bagdad es la provincia más afectada.
«Una persona murió como consecuencia de la tormenta de arena», afirmó el funcionario. No obstante, aseguró que este número es todavía preliminar.
La mayor parte de los casos de sofocación no presentan cuadros críticos, manifestó Al Badr, a su vez, que señaló que el mayor porcentaje de los hospitalizados corresponde a personas asmáticas o de avanzada edad.
Fuentes locales informaron que los centros de salud de Ramadi (centro) han recibido pacientes desde el primer momento de la tormenta que afectó a seis provincias del país.
Más de 320 personas tuvieran que ser hospitalizadas en la provincia de Saladino, según expresó el director de la Oficina de Sanidad provincial, Raid Ibrahim Hamad al Yuburi.
Por su parte, el director de la Oficina de Sanidad de la provincia de Anbar, Qais al Ani, detalló que 191 personas tuvieron que ser ingresadas en la zona, mientras que en Qadisiya y en Nayaf fueron hospitalizadas otras cien personas, respectivamente, según señala la cadena de televisión kurda Rudaw.
Las autoridades instaron a la población a acudir a los centros más cercanos de salud en caso de presentar síntomas de asfixia, con el fin de no lamentar pérdidas humanas.
El Ministerio de Medio Ambiente iraquí indicó en abril que el número de días con estas tormentas pasó de 243 a 272 al año durante las últimas dos décadas, antes de alertar que podría llegar a ser de 300 al año de cara a 2050.
Las consecuencias del cambio climático se han hecho sentir con fuerza en Irak donde cada vez se vuelven más prolongadas las sequías y se ha registrado un aumento notable en las temperaturas.