Un grupo de investigadores desarrolló una novedosa técnica que emplea un robot para implantar microelectrodos en el cerebro de personas con discapacidad visual.
La iniciativa, liderada por la Universidad Miguel Hernández (UMH) junto al Hospital IMED Elche y el Instituto de Investigación Sanitaria y Biomédica de Alicante (Isabial), tiene como objetivo acceder de manera segura a la superficie cerebral para mejorar el sentido de la vista de los pacientes.
Utilizando el robot ‘Stealth Autoguide’ de Medtronic y un avanzado sistema de neuronavegación, esta técnica innovadora permite realizar implantes mínimamente invasivos en el cerebro, indicó Eduardo Fernández, director del Proyecto.
A pesar de los resultados alentadores obtenidos hasta ahora, este avance se encuentra en una fase investigativa y no está listo para su aplicación generalizada, pero en los próximos meses esperan comenzar las pruebas con voluntarios.
Los implantes de microelectrodos en el cerebro tienen como finalidad estimular de manera controlada la corteza visual en personas con pérdida de visión, ya sea parcial o total debido a condiciones como el glaucoma o la retinosis.
Recientemente, el equipo de investigadores logró con éxito la primera implantación en un individuo ciego.
Además, este procedimiento marca un hito al ser la primera vez que se emplea un robot quirúrgico en un implante de este tipo. Según Pablo González, coordinador del equipo de neurocirugía, el sistema robótico guía la inserción de los electrodos a través de una pequeña incisión milimétrica, evitando así la necesidad de una craneotomía o apertura del cráneo.