Pese a la solicitud desesperada del mandatario Volodímir Zelenski y la presión del bloque europeo, en especial de países como Polonia; el Gobierno de Alemania no entregará en lo inmediato los tanques de combate «Leopard 2» comprometidos a Ucrania.
El recientemente nombrado ministro de Defensa de Alemania, Boris Pistorius, anunció este jueves que la entrega será entre finales de marzo y principios de abril.
En la víspera, el canciller alemán Olaf Scholz aprobó el envío de los tanques de fabricación germana al régimen ucraniano y autorizó también a sus aliados a suministrarlos.
«No tengo ninguna razón para pensar que será demasiado tarde», afirmó Pistorius, quien negó que una presunta indecisión de su Gobierno retrase los envíos de los carros de guerra que reclama Kiev para contrarrestar la operación militar especial de Rusia.
Pistorius pronunció estas declaraciones durante su primera visita a tropas de la Bundeswehr (ejército alemán) desde que asumió su cargo, hace una semana, en sucesión de Christine Lambrecht, quien dimitió ante la presión para que acelerara la dotación de equipamiento militar de tecnología avanzada a Ucrania.
El canciller Scholz insistió reiteradamente, antes de dar luz verde a esos envíos, que estos debían producirse «en estrecho consenso» con sus aliados, tanto europeos como transatlánticos y especialmente con Estados Unidos (EE.UU.), con el que comparte liderazgo entre los países que conforman la Alianza del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Un “paso peligroso” en el desarrollo del conflicto, había argumentado para postergar la decisión de enviar las unidades de combate.
El dirigente alemán comunicó el miércoles que entregará una compañía de esos carros de combate del tipo 2A6 correspondientes a su ejército, lo que supone 14 unidades, además de autorizar a los aliados que dispongan de esos blindados, de fabricación alemana, a sumarse a la dotación del régimen de Kiev.
Previsiblemente, a los de Alemania se unirán otros 14 de Polonia, más un número no precisado de otros países que alientan la prolongación del conflicto, como Países Bajos, España, Noruega y Finlandia.
EE.UU. confirmó asimismo ayer el envío de 31 «Abrams», mientras que Reino Unido había anunciado ya sus 14 «Challenger 2s». Francia, hasta ahora, solo ha dicho que no descarta unirse a la «ayuda» militar a Ucrania con sus «Leclerc».
Rusia ha criticado reiteradamente las entregas de armas occidentales a Kiev, señalando que no tributan a acelerar un acuerdo de paz y que además acercan a la OTAN a la peligrosa línea de un enfrentamiento militar directo con el ejército ruso, que el presidente Vladímir Putin ha advertido significaría una «catástrofe global«.
