El senador republicano, John Kennedy acusó el miércoles al Gobierno venezolano de querer matar a funcionarios de Estados Unidos (EE.UU), con armas adquiridas con el dinero del petróleo comprado por el país norteamericano.
“Estamos comprando petróleo de Venezuela para que tengan dinero para comprar armas y tratar de matarnos”, afirmó el senador por el estado de Luisiana, durante una entrevista sobre la política energética de la administración Biden y la amenaza de China sobre ‘Kudlow’.
Sen. John Kennedy (R-LA): "We're buying oil from Venezuela so Venezuela will have more money to buy weapons to try to kill us." pic.twitter.com/elcJmRLmTX
— The Recount (@therecount) December 7, 2022
Esta no es la primera vez, que un funcionario de EE.UU. realiza acusaciones sin fundamentos contra el país suramericano al que el Gobierno estadounidense ha mantenido bajo sanciones, afectando las relaciones económicas y la vida de los venezolanos.
En octubre de 2018, el presidente venezolano denunció a la administración del exmandatario estadounidense Donald Trump de intentar asesinarlo y de haber dado instrucciones a la expresidente de Colombia, Iván Duque, para ejecutar la orden.
EE.UU. aumentó venta de armas
EE.UU. ha elevado en los últimos meses los niveles en venta de armas a otros países. La industria armamentista crece en Europa del Este mientras el Gobierno del presidente, Joe Biden, envía armas a Ucrania, generando nuevas oportunidades a la industria en la región.
Desde febrero, EE.UU. ha proporcionado 18.000 millones de dólares en ayuda militar al país europeo. Mientras que en junio, envió un cargamento superior a las 80 toneladas de armas, a de las cuales Washington no tenía idea de dónde terminaban realmente artefactos. Solo controlaba el 10%.
Estados Unidos, como país que socava la soberanía de otras naciones, aprobó dos planes para vender armas Taiwán destinado a reforzar los sistemas de defensa antimisiles Patriot de la isla, acción a la que China se opone firmemente.
Kennedy señala a Venezuela mientras la sociedad estadounidense sufre el aumento desmedido de la violencia, producto de la cantidad de armas en manos de los civiles.