Rusia anunció este lunes la suspensión de todas las importaciones de productos marítimos de Japón, en respuesta al vertido al mar de las aguas residuales de la central nuclear Fukushima.
«El Servicio Federal para la Supervisión Veterinaria y Fitosanitaria, Rosseljoznadzor, se suma a las medidas restrictivas temporales de la República Popular China con respecto a la importación de pescados y mariscos procedentes de Japón a partir del 16 de octubre como medida de precaución», señaló la agencia rusa en un comunicado.
Rosseljoznadzor explicó que las restricciones durarán «hasta que se confirme por completo la seguridad de los productos y el cumplimiento de los requisitos de la Unión Económica Euroasiática (UEE), así como su análisis por parte de los especialistas de Rosseljoznadzor», citó el diario Kommersant.
El presidente de la Asociación Panrusa de Empresas, Empresarios y Exportadores Pesqueros, German Zverev, afirmó que las importaciones de pescado del país son mínimas, y en 2021 representaron apenas el 0,25% de las importaciones totales rusas de pescado y mariscos.
Rusia suspende importación de pescado y mariscos de Japón
Tras China, #Rusia prohíbe todas las importaciones de productos marítimos de #Japón, como respuesta al vertido al mar de las aguas residuales tratadas de la central nuclear #Fukushima. (rml) https://t.co/Dh0vyQKJzm
— DW Español (@dw_espanol) October 16, 2023
En 2011 se produjo un accidente en la central nuclear de Fukushima-1. El agua utilizada para enfriar los reactores se almacenó en tanques después de su purificación. El 24 de agosto de 2023, la empresa japonesa Tokyo Electric Power comenzó a descargar al océano agua purificada de sustancias radiactivas.
Un mes después, la agencia rusa informó que, según los resultados de un estudio de los productos pesqueros obtenidos cerca del lugar de descarga de agua de la central nuclear japonesa Fukushima-1, no reveló ninguna violación.
Sin embargo, este lunes el Ministerio de Asuntos Exteriores japonés anunció que había proporcionado a la parte rusa “información adicional” sobre la liberación de agua de la central nuclear Fukushima-
China suspendió en agosto todas las importaciones niponas de este tipo después de que Japón empezara a verter en el océano Pacífico parte de los 1,34 millones de toneladas de aguas residuales de la central de Fukushima.
El agua es tratada mediante un complejo sistema de filtrado que elimina la mayor parte de los elementos radiactivos nocivos, menos el tritio (un isótopo nuclear presente en la propia naturaleza), antes de su almacenamiento en tanques para ser vertida.
Este proceso fue validado por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y Tokio insiste en que las aguas no representan peligro ni para el medioambiente ni para la salud humana.