El Ministerio de Exteriores de Rusia anunció restricciones en contra de los líderes de los principales organismos europeos, bajo el principio de reciprocidad del derecho internacional, ante las sanciones aplicadas a varios funcionarios rusos por el conflicto bélico en Ucrania.
En un comunicado oficial, la cancillería eslava argumenta la decisión porque Bruselas sometió “masiva y arbitrariamente a ciudadanos rusos y empresas nacionales a restricciones unilaterales. Ignorando todas las normas legales internacionales aplicables”.
Asimismo, reprocharon que Europa esté negada a admitir que “a lo largo de los años han tolerado el fortalecimiento del sentimiento rusofóbico y neonazi en Ucrania”, así como la militarización e integración a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para contener a Rusia militarmente.
Bajo esa premisa, el Kremlin amplió la lista de representantes de los Estados miembros de la Unión Europea (UE) que tienen prohibida la entrada al territorio ruso “de acuerdo con el principio de reciprocidad, que es básico para el derecho internacional”.
El ministerio encabezado por el canciller Serguéi Lavrov detalló que las restricciones “se aplican a los principales líderes de la Unión Europea, incluidos varios comisarios europeos y jefes de estructuras militares de la UE”.
También están señalados la mayoría de diputados del Parlamento Europeo que promueven “políticas antirrusas”, los representantes de los gobiernos y parlamentos de algunos Estados de la UE, así como “figuras públicas y trabajadores de los medios de comunicación que promueven sanciones ilegales contra Rusia”.
“Reafirmamos que cualquier acción hostil por parte de la UE y sus estados miembros seguirá enfrentándose inevitablemente a una dura respuesta”, recalcó la comunicación.
Rusia advirtió situación de Kiev
La cancillería recordó en el comunicado que en el pasado hizo repetidos llamamientos para advertir sobre “el sabotaje por parte del régimen de Kiev” y el “estrangulamiento” que realizaron contra personas de habla rusa en Ucrania, pero se “hicieron la vista gorda ante el exterminio sistemático de civiles en Donbás”.
A pesar de ello, Bruselas siguió “un camino sin salida de introducir medidas restrictivas contra Rusia”.
Finalmente, denunciaron que la UE trata de involucrar a otros países soberanos para ampliar las sanciones contra Moscú, lo cuales están “sujetos a presiones y chantajes sin precedentes”.