El embajador ruso en Damasco, la capital siria, Alexander Efimov, advirtió el jueves, en una reunión organizada por la Unión de Escritores Árabes, que Israel está provocando a Rusia con sus reiterados ataques en Siria.
El diplomático ruso explicó que los ataques israelíes tienen como objetivo “aumentar la tensión, reanudar las operaciones militares y dejar espacio para que Occidente lleve a cabo actividades militares en Siria”.
“Debemos ser pacientes para no tomar medidas que puedan tener repercusiones inesperadas y negativas”, pero advirtió al régimen israelí que esto no significa que Rusia no hará nada.
Desde el estallido del conflicto en Siria en 2011, Israel ataca con frecuencia objetivos militares o civiles en el país levantino a fin de frenar el rápido avance del Ejército sirio hacia los escondites de las bandas radicales, no obstante, en la mayoría de los casos, las unidades de la defensa antiaérea sirias han frustrado dichas acometidas.
El último ataque aéreo israelí en Siria, realizado el 7 de marzo, causó la muerte de dos coroneles miembros del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, un país aliado que, a solicitud de Damasco, brinda asesoría militar al Ejército sirio en el combate a los terroristas.
En este sentido, el Cuerpo de Guardianes de Irán advirtió unos días después del ataque que “el régimen sionista sin duda pagará el precio de tal crimen” y el 13 de marzo atacó con misiles las bases secretas de la agencia del espionaje israelí (el Mossad) en la región semiautónoma de Kurdistán en Irak.
