Serguéi Lavrov, ministro de Exteriores de Rusia, condenó el constante suministro de armas a Ucrania que realiza Occidente y calificó esas acciones de “contraproducente” para la seguridad regional.
“Occidente debe darse cuenta de que consentir los sentimientos militaristas de Kiev no conducirá a nada bueno”, dijo el canciller a su llegada a Armenia, donde sostendrá una reunión con representantes de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC).
Lavrov reiteró el llamado a Kiev para que abandone la retórica militarista y se centre en la implementación de acuerdos que permitan zanjar el conflicto bélico iniciado en febrero. “Llegó la hora de dejar esta retórica y de hacer cosas concretas, en vez de fomentar pasiones en el espacio mediático”, acotó.
Además, el jefe de la diplomacia rusa advirtió que las exigencias de las fuerzas militares ucranianas a Occidente es para “armarse hasta los dientes”, incluso con sistemas de misiles antibuque que planean, según los funcionarios gubernamentales ucranianos, “usar contra los buques de la Flota rusa del mar Negro”.
EE.UU. envía arsenales a Ucrania
Según cifras del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, desde finales de febrero de este año Estados Unidos es el líder en el suministro de armas a Kiev, con un volumen de asistencia militar que supera los 3.800 millones de dólares.
También, se han aprobado otros 40.000 millones de dólares para un supuesto apoyo humanitario, de los cuales más de 23.000 millones terminan en fondos guerreristas para continuar la confrontación bélica ruso-ucraniana.
El Kremlin califica la política militar de EE.UU. como “cínica”, porque el Pentágono y el Departamento de Estado no tienen un control sobre las armas que envían a Kiev, las cuales terminan, en su mayoría, en manos de los neonazis y ultranacionalistas ucranianos.
“Ahora, los neonazis ucranianos están utilizando activamente armas suministradas por Estados Unidos contra la población civil, bajo la presión de Washington, sin importar las vidas de los civiles y, lo peor de todo, los niños y adolescentes. Además, los ataques están dirigidos deliberadamente a los barrios de Donetsk que han estado bajo ataque desde 2014”, denunció la portavoz del Kremlin, María Zajárova, en rueda de prensa el pasado viernes 3 de junio.
