Redacción Fuser News con información de Sputnik Mundo
Run Run (“corre corre” en inglés) es el nombre de un zorro que había sido comprado cerca del Mercado Central a un vendedor ambulante, por una familia del distrito limeño de Comas, como un husky siberiano.
El ejemplar de ocho meses fue adquirido en febrero de 2021 por 50 soles -unos 12,50 dólares-, y con el tiempo fue creciendo con los rasgos característicos de un zorro andino (Lycalopex culpaeus).
Antes de que la familia decidiera qué hacer, el animalito se escapó y durante dos semanas comió cuyes, patos y gallinas, lo que molestó a varios vecinos del asentamiento Sol Naciente, quienes se terminaron encariñando con Run Run y dándole de comer.
EL MÁS BUSCADO.
Aunque usted no lo crea, se ha organizado un gran despliegue policial en búsqueda de Run Run, ya van casi dos semanas y no han podido capturarlo. pic.twitter.com/mSMlEo8niX
— Junior Parra (@JuniorParra19) November 9, 2021
Control sanitario
Este lunes, Run Run fue capturado por el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego de Perú—, mientras el vecindario lloró por el pequeño zorro.
El Serfor desplegó varios operativos para capturar al zorrito: colocó trampas y cercas, lo buscó con drones, hasta que decidieron lanzarle dardos tranquilizantes.
Actualmente el animal está en el zoológico Parque de las Leyendas, donde se asegurarán de que esté tranquilo y luego programarán un control sanitario para descartar enfermedades que «puede estar portando al estar en tanta relación íntima con animales domésticos».
Al momento de su captura, Run Run pesó 7,4 kilos, lo que quiere decir que está un poco flaco, por lo que lo alimentarán con carnes rojas y blancas, y frutas y será mantenido en cuarentena por un mes, alejado de los visitantes al zoológico.
Tráfico de fauna silvestre
Run Run se convirtió en el rostro más visible del tráfico ilegal de animales en Perú, donde miles de especies silvestres son sacadas de su entorno natural para ser comercializadas en pésimas condiciones.
Actualmente más de 300 especies están amenazadas por el tráfico ilegal de fauna silvestre en el país, donde cada año se decomisan más de 5.000 especímenes por actividades ilícitas que ponen en riesgo la biodiversidad del país, reconocido por albergar más del 70% de la diversidad biológica del planeta.
Las leyes peruanas condenan este delito con tres a cinco años de cárcel.