Un Comité de Supervisión del Congreso estadounidense presiona al Departamento de Justicia para saber cómo el autor de uno de los escándalos de soborno más grandes de la historia militar de esa nación, Leonard Glenn Francis, apodado «Fat Leonard», pudo escapar mientras era aparentemente supervisado en su confinamiento domiciliario.
En una carta enviada este miércoles, una docena de republicanos le informaron al fiscal general, Merrick Garland, que están investigando esta falla colectiva de los servicios de libertad condicional, que tuvo lugar antes del juicio programado de Francis.
Los legisladores quieren determinar cómo el criminal «fue dejado a su suerte para escapar al extranjero”. También solicitaron una serie de comunicaciones entre empleados del Departamento de Justicia y de las agencias de aplicación de la ley estatales, para el próximo 26 de octubre.
Cabe destacar que Fat Leonard fue arrestado por agentes de la Interpol en Venezuela hace unas semanas y ha intentado obtener asilo en la nación suramericana.
¿Posible Canje?
En este contexto, los congresistas puntualizan que necesitan información sobre qué esfuerzo se están realizando para asegurar su regreso al país con pero «mínimas concesiones».
Recientemente, Roi López Rivas, uno de los integrantes del Movimiento Free Alex Saab, propuso negociar directamente la opción de intercambiar al diplomático Alex Saab por Leonard Francis, quien permanece prófugo de la justicia estadounidense, sindicado por sobornar a casi todos los altos mandos de la Armada de Estados Unidos (EE.UU).
López señaló que probablemente EE.UU. quiera pedir que esta persona regrese al país para recibir su sentencia de aproximadamente 25 años. Cabe destacar que el pasado 1 de octubre, Venezuela y EE.UU. acordaron el mutuo intercambio de prisioneros como un gesto de buena voluntad en el nuevo tipo de relaciones propuesto entre Washington y Caracas.
Fat Leonard permaneció bajo custodia durante años mientras cooperaba con la investigación del gobierno, pero fue liberado con una licencia médica a principios de 2018. Al detenido se le confirió casa por cárcel, aún conociendo el peligro de fuga que representaba.
