El nuevo ministro de Finanzas de Reino Unido, Jeremy Hunt, informó este sábado que algunos impuestos aumentarán y se tomarán decisiones más estrictas sobre los gastos, lo que marca un nuevo cambio de rumbo en la gestión de la primera ministra Liz Truss.
La representante británica, quien lucha por mantenerse en el puesto, despidió el viernes al jefe de tesorería, Kwasi Kwarteng, y desechó partes de su controvertido paquete económico, en un intento por calmar los mercados financieros que han estado en crisis durante tres semanas.
Ante las bajas calificaciones de Truss en las encuestas, muchos de los legisladores del el gobernante Partido Conservador recurrieron a Hunt, para que este ayude a salvar su cargo como primera ministra dentro de los 40 días.
“Vamos a tomar algunas decisiones difíciles”, dijo Hunt. Además, el ministro de Finanzas señaló que “lo que quiere la gente, lo que quieren los mercados, lo que el país necesita ahora, es estabilidad”.
“Ningún presidente puede controlar los mercados. Pero lo que puedo hacer es demostrar que podemos pagar nuestros impuestos y planes de gasto, y que se necesitan algunas decisiones difíciles tanto en el gasto como en los impuestos”, reiteró el funcionario.
Colapso de los mercados
Con una plataforma de grandes recortes de impuestos para estimular el crecimiento, que Kwarteng anunció formalmente el mes pasado, Truss ganó las elecciones para reemplazar a Boris Johnson, pero la falta de detalles sobre cómo se financiarían los recortes provocó el colapso de los mercados.
Estos planes para reducir los impuestos para las personas con altos ingresos fueron abandonados por Truss, que además anunció que los impuestos a las empresas aumentarían, descartando la estrategia para mantenerlos en su nivel actual.
En este sentido, se espera que para el 31 de octubre Hunt anuncie los planes presupuestarios a mediano plazo del gobierno, lo que será una prueba clave de su capacidad para demostrar que su política económica puede restaurar la credibilidad.
El nuevo ministro advirtió que todos los departamentos gubernamentales tendrán que encontrar más eficiencia de la que planean.
“Algunos impuestos no se reducirán tan rápido como a la gente le gustaría, y algunos impuestos subirán. Así que será difícil”, dijo, y agregó que se reunirá con los funcionarios del Tesoro antes de cumplir con la tregua el domingo.
Errores cometidos
Hunt, un ministro experimentado y visto por muchos en su partido como una pareja segura, dijo que estaba de acuerdo con la estrategia básica del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, de impulsar el crecimiento económico y que su enfoque no estaba funcionando.
“Se han cometido algunos errores en las últimas semanas. Es por eso que estoy sentado aquí. Fue un error reducir los impuestos altos en un momento en que les pedimos a todos que hagan sacrificios”, enfatizó.
Destacó que otro error fue preparar planes fiscales a “ciegas” sin permitir que el organismo de control fiscal independiente, la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria, verificara las cifras.
Este es el cuarto Ministro de Hacienda de Reino Unido en cuatro meses, lo que refleja la crisis política británica desde que Johnson fue despedido tras una serie de escándalos.
