Ana Belén Montes, acusada por los Estados Unidos de espionaje podría ser liberada esta semana de la cárcel Carswell, en Fort Worth, Texas, donde se encuentra recluida por haber suministrado información clasificada de EE.UU. al Gobierno cubano.
El proyecto mediático internacional que muestra los movimientos populares de todo el mundo, Peoples Dispatch, señaló en una nota que Montes sería liberada el próximo 8 de enero, loque representa una victoria del Movimiento para liberar a los presos con conciencia puertorriqueña.
"I believe our government’s policy toward Cuba is cruel and unfair, profoundly unneighborly, and I felt morally obligated to help the island defend itself from our efforts to impose our values and our political system on it.”#AnaBelenMontes #Cubahttps://t.co/64uyd6eOBM
— Peoples Dispatch (@peoplesdispatch) January 4, 2023
Ana Belén Montes es una exanalista de la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA), que fue arrestada el 21 de septiembre de 2001 y condenada a 25 años de prisión el 16 de octubre de 2002 por espionaje en nombre del Estado cubano.
Se declaró culpable de los cargos que se le imputaban y testificó ante el tribunal: “Obedecí a mi conciencia antes que a la ley. Creo que la política de nuestro gobierno hacia Cuba es cruel e injusta, profundamente descortés, y me sentí moralmente obligada a ayudar a la isla a defenderse de nuestros esfuerzos por imponerle nuestros valores y nuestro sistema político”.
Cuba en la lista de patrocinadores del terrorismo
Medios internacionales destacan que Montes utilizó su posición dentro del gobierno de los Estados Unidos para influir en la política hacia Cuba.
“Un ejemplo fue en 1998, cuando escribió una política que suavizó la evaluación del Pentágono de la amenaza que representaba Fidel Castro, en un momento en que Cuba estaba en la lista de Estados Unidos de Estados Patrocinadores del Terrorismo (Estados Unidos eliminó a Cuba de esta lista en 2015, solo para volver a agregar la nación en 2021).
Según ProLibertad, una organización que lucha por la liberación de los presos políticos puertorriqueños en Estados Unidos, Belén Montes soportó un aislamiento casi total durante las dos décadas de su encarcelamiento.
Cuando fue encarcelada inicialmente, estaba restringida a un grado en el que no tenía acceso a la televisión, a los periódicos y no podía interactuar con ningún otro recluso. Sin embargo, en los últimos años, sus visitas y correspondencia se limitaron a una lista de solo veinte personas, a quienes conocía antes del encarcelamiento.
