El primer ministro de Malasia, Ismail Sabri Yaakob, anunció este lunes la disolución del Parlamento, medida que implica la celebración de elecciones en un plazo máximo de 60 días.
«(Las elecciones) desacreditarán a aquellos que cuestionan la legitimidad del Gobierno«, justificó la decisión en un discurso televisado, reportado por EFE. «Con este anuncio, se devuelve el poder a la gente», agregó.
«Espero que el pueblo vote inteligentemente por la estabilidad, el crecimiento económico y la armonía del país», declaró el responsable, aludiendo a la diversidad étnica y religiosa de Malasia. La mayor parte de la población es de origen malasio y de confesión musulmana, pero en el país viven importantes minorías, sobre todo de origen chino e indio.
Crisis política
Sabri Yaakob es el tercer primer ministro de Malasia desde las elecciones de 2018, ganadas por primera vez por el partido Pakatan Harapa, liderado entonces por Mahathir Mohamed, cuya renuncia en febrero de 2020 favoreció el retorno al poder de la Organización Nacional de Malayos Unidos (Umno), en la figura de Muhyiddin Yassin, quien también en agosto de 2021, en medio de críticas por la gestión de la pandemia de Covid-19.
El anuncio de disolución del Parlamento sucedió después que el líder malasio sostuviera una reunión en la víspera con el monarca Abdullah de Pahang, quien le nombró primer ministro el año anterior.
Los próximos comicios prevén facilitar la resolución de la crisis política que vive Malasia desde la dimisión de Mahathir. Desde la independencia del país del sudeste asiático del Reino Unido en 1957, Umno siempre ha sido la formación gobernante, salvo el periodo de dos años liderado por Mahathir.
La Comisión Electoral se reunirá de forma inminente para decidir sobre las candidaturas a primer ministro y marcar una fecha para la votación.