El presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, alertó este domingo sobre un posible ataque del Ejército kosovar contra la población serbia que vive en el norte de la provincia autónoma de Kosovo y Metojia.
Vucic, citado por RT, afirmó que «la atmósfera se ha caldeado y los serbios no sufrirán más atrocidades. Mi súplica a todos es que intenten mantener la paz a cualquier precio. Pido a los albaneses que entren en razón y a los serbios que no caigan en las provocaciones«, agregó.
Esto sucede tan sólo unos días después de que el ministro del Interior de Serbia revelase que una "importante agencia extranjera" le ha estado presionando para que cambie su postura oficial sobre Rusia y China.
Washington quiere ver a Europa arder antes de perder su hegemonía. https://t.co/KxsGavU5D0— Helena Villar (@HelenaVillarRT) July 31, 2022
Asimismo, el mandatario serbio instó a las grandes potencias que reconocieron la independencia de Kosovo a «que presten un poco de atención a la ley y la realidad sobre el terreno y no permitir que sus pupilos causen conflictos».
Kosovo declaró unilateralmente su independencia de Serbia el 17 de febrero de 2008, nueve años después del final de la guerra, y no es reconicido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ni por la Unión Europea (UE), donde varios estados miembros como España, Grecia, Rumanía, Eslovaquia y Chipre cuestionan su existencia como nación, aunque cuenta con el respaldo de Estados Unidos (EE.UU.).
#Ahora Se reportan tiroteos en la ciudad de Novi Pasar, Serbia, cerca de la frontera con Kosovo. pic.twitter.com/pYYTEDrbvI
— MV (@Mision_Verdad) July 31, 2022
Tensión fronteriza
Previo a las declaraciones del presidente serbio, se reportó el bloqueo de carreteras en la frontera entre Kosovo y Serbia, con el sonido de sirenas y disparos, por lo que Belgrado puso en alerta al Ejército.
Medios locales informaron que después de las 6 de la tarde (hora local), sonaron sirenas antiaéreas en el norte de Kosovska Mitrovica, que desde el fin de la guerra se encuentra dividida en dos zonas: la parte sur, donde vive la mayoría albanesa, y la parte serbia en el norte.
También se informó sobre tiroteos en la ciudad de Novi Pasar, Serbia, cerca de la frontera con Kosovo.
Asimismo, las fuerzas militares de Kosovo se están movilizando Yarinje, límite fronterizo en el norte del país, mientras que Serbia está agrupando al ejército, incluyendo aviones de combate, en la frontera con Kosovo.
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Rusia se pronuncia
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, denunció que se trata de un paso más «hacia la expulsión de la población serbia de Kosovo, desplazando a las instituciones serbias de Kosovo que protegen los derechos de la población serbia del gobierno arbitrario de los radicales de Pristina dirigidos por Albin Kurdi».
«Los dirigentes de Kosovo saben que los serbios no quedarán indiferentes ante un ataque directo a sus libertades y están agravando deliberadamente la situación para lanzar un escenario violento», escribió Zajárova en su canal de Telegram.
La vocera de la diplomacia rusa añadió que las acciones de Kosovo demuestran el fracaso de la mediación de la UE, por lo que pidió a «Pristina y a EE.UU. y la UE, que la apoyan, que pongan fin a las provocaciones y respeten los derechos de los serbios en Kosovo», publicó
