Un grupo de especialistas en salud de los Países Bajos estudia establecer una edad mínima para la ingesta de comida rápida como herramienta de presión, en caso de que no se logren acuerdos con la industria en materia de prohibición de alimentos no saludables y el incremento de los precios al consumidor para que los llamados “alimentos chatarra” dejen de ser la primera opción.
Según reporta la agencia EFE, el Instituto Científico del democristiano CDA, uno de los cuatro partidos que conforman la coalición gobernante en el país europeo, publicó un informe en el que se plantean similitudes con los debates históricos acerca de consumo de alcohol y el tabaco, sustancias para las que existe una edad mínima, y consideran que “la comida que es poco sana está causando ahora más daño que fumar”.
Gerard Adelaar, asesor independiente de políticas de salud y estilo de vida, y uno de los autores del estudio, afirmó que es necesaria una forma “radicalmente diferente” de abordar lo que las personas comen y beben para mejorar el estilo de vida.
Een radicaal andere omgang met ons eten en drinken is nodig, zodat levensstijl en lichaam beter op elkaar aansluiten. Hierover verschijnt vandaag een advies van het @WIvoorhetCDA.
Lees een interview met mij in Trouw:https://t.co/f8sEm1CRWG
— Gerard Adelaar (@GerardAdelaar) April 19, 2022
Adelaar va más allá y señala que la comida rápida debe entenderse de la misma manera que se entienden hoy en día el alcohol y el tabaco, dos productos “muy dañinos para la salud”, por lo que se debe evitar que los consumidores empiecen a usarlos desde muy jóvenes.
https://twitter.com/Forbes_Mexico/status/1516763620037861382
Propuesta pionera
Se trata de la primera vez que se propone establecer un mínimo de edad para la compra de comida rápida, y en caso de materializarse en una ley respaldada por Parlamento y Senado, Países Bajos se convertiría en la primera nación en la que los niños no podrían festejar sus cumpleaños en un restaurante de comida rápida, por citar un ejemplo.
“¿Cuánto de realista es esto? Pues también nos hacíamos la misma pregunta hace veinte años cuando se introdujeron medidas contra el tabaco y el alcohol. Y esas medidas están hoy muy normalizadas. El problema real es que hay un desajuste entre nuestro estilo de vida y el cuerpo”, sostiene Adelaar.
El documento aclara que solo en caso de que los restaurantes que venden comida rápida no ofrezcan menús más saludables, se sugiere prohibir la venta de la comida rápida a niños y jóvenes, aunque no se define el mínimo de edad legal que se debería establecer para reducir el acceso de los más jóvenes a los alimentos poco saludables de forma radical.
'Het is raadzaam de @WIvoorhetCDA-ideeën over een gezonde levensstijl serieus te bespreken'https://t.co/dgd15ZZCpS
— Gerard Adelaar (@GerardAdelaar) April 20, 2022
“Criar generaciones sanas”
La propuesta ya ha generado reacciones opuestas, como es el caso del diputado Rudmer Heerema, perteneciente al grupo de derecha VVD -partido del primer ministro Mark Rutte-, quien calificó esta idea como “poco condescendiente” con los progenitores.
“Imaginen: una fiesta infantil sin patatas fritas ni croquetas, pero con coles de Bruselas. No vamos a hacer algo así. Solo daremos a todos una porción de patatas fritas de vez en cuando”, señaló, en reacción a la propuesta.
DT Rudmer Heerema: RT NOS: Denktank CDA bepleit minimumleeftijd voor fastfood https://t.co/zM0Cui3myH https://t.co/S2G73yhNIL
— Politwoops NL (@PolitwoopsNL) April 19, 2022
El partido Foro para la Democracia FvD, del ultraderechista Thierry Baudet, tampoco está de acuerdo con la idea y afirmó desde su cuenta de Twitter que “la salud de los niños sigue siendo responsabilidad de los padres y el gobierno no debe interferir en todo, debe dejar que la gente tome sus propias decisiones”.
Iedereen weet dat patat ongezond is, zeker als het gebakken is in een chemische zaadolie zoals bij fastfoodrestaurants. Maar de gezondheid van kinderen blijft de verantwoordelijkheid van ouders. De overheid moet zich niet overal mee bemoeien. Laat mensen zelf keuzes maken. #FVD https://t.co/66vMpX49E5
— Forum voor Democratie (@fvdemocratie) April 19, 2022
Desde dentro del propio partido CDA, la diputada Anne Kuik subrayó que el Instituto Científico escribió un “informe importante sobre vida saludable” y que “la obesidad es un problema creciente, también entre los niños”, pero admitió que la opción del “mínimo de edad va demasiado lejos” y que hay que centrarse antes en la propia industria.
Sin embargo, los expertos lo tienen claro: “Las reglas del juego para la industria de comida rápida deben cambiar, o vamos a seguir con los mismos problemas”, concluyó Adelaar.