El Magistrado de la Comisaría de Margalla de Islamabad (Pakistán) emitió una orden de arresto contra el ex primer ministro, Imran Khan, por proferir amenazas durante un discurso en agosto pasado, lo que se presume delito bajo la Ley Antiterrorista de este país.
El Tribunal Superior de Islamabad (IHC, por sus siglas en inglés) emitió la orden horas después de que Khan presentara una declaración jurada en el caso de desacato en su contra por sus controvertidos comentarios, en la que admitía que «podría haber cruzado la línea» en su crítica a la jueza Zeba Chaudhry, y que estaba dispuesto a disculparse, «si ella tuvo la impresión» de haberse excedido en sus palabras.
Khan dijo a la corte que «nunca haría nada en el futuro» que dañara la dignidad de cualquier tribunal y el poder judicial, agregando que está dispuesto a tomar las medidas adicionales que el IHC «considere necesarias y apropiadas para la satisfacción de la honorable corte».
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El pasado 20 de agosto, el político pakistaní, que lidera el partido Pakistan Tehreek-e-Insaf (PTI), en un mitin atemorizó y amenazó a altos funcionarios de la Policía y a la respetada jueza Chaudhry, reseñó en esa oportunidad la prensa local.
En el discurso televisado, Khan advirtió a los jefes de policía de Islamabad que presentaría un caso judicial contra ellos por «torturar» al líder del PTI, Shahbaz Gill, bajo custodia policial, y extendió la acusación a la jueza, Chaudhry, quien autorizó a la policía la custodia de su estrecho colaborador para alargar los interrogatorios.
Destituido este año
De acuerdo con el líder del PTI, a Gill, quien estuvo recluido en un hospital tras su arresto, se le infligió tortura física, incluido «abuso sexual». A través de un vídeo difundido en redes sociales, Shahbaz Gill acusó a los oficiales de seguridad de torturarlo físicamente y agredirlo sexualmente.
“Me dieron descargas eléctricas en el pene y los testículos”, afirmó en la grabación.
El Gobierno paquistaní, que ha negado las acusaciones de tortura, difundió recientemente otro vídeo en el que se puede ver a Gill sentado en una cama de un centro médico como prueba de que se encuentra «perfectamente bien».
Khan, exjugador de críquet, llegó al poder como Primer Ministro de Pakistán en 2018 y fue destituido en 2022, tras no poder superar una moción de censura.
