La Organización de las Naciones Unidas (ONU) donó cinco millones de dólares del Fondo Central de Respuesta a Emergencias para atender las necesidades humanitarias que provoca la guerra entre pandillas en Haití, así lo declaró el viernes el portavoz del organismo, Farhan Haq.
El funcionario dijo que en Puerto Príncipe, capital haitiana, los niveles de inseguridad son muy elevados y comprometen el acceso de la ayuda humanitaria dirigida a las personas afectadas para la distribución de alimentos o dinero en efectivo.
“Desde julio, cientos de personas han muerto en los enfrentamientos entre pandillas en Cité Soleil, en Haití, y muchas otras han quedado atrapadas en los enfrentamientos, lo que ha impedido su acceso a agua potable, alimentos y atención médica”, explicó el portavoz.
I’ve allocated US$5M from @UNCERF for an urgent response for humanitarian needs caused by gang violence in #Haiti.
Hundreds of people have been killed & 277k people are affected by the recent clashes in Cité Soleil. This allocation allows agencies to scale up critical response. pic.twitter.com/4BgUpDQa2i
— Martin Griffiths (@UNReliefChief) August 18, 2022
Se estima que alrededor de 1 millón 500 mil personas no tienen acceso a los servicios de salud y educación, debido al clima de ingobernabilidad provocado por las pandillas en los barrios, especialmente en Cité Soleil, dice Haq.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y el Programa Mundial de Alimentos también facilitó algunos recursos como agua potable, alimentos, atención médica y apoyo educativo a unas 100 mil personas.
Haq agregó que el Plan de Respuesta Humanitaria para Haití 2022 busca aportar 373 millones de dólares, pero únicamente se ha financiado en un 14%.
Iniciativa china
Recientemente, China solicitó al Consejo de Seguridad del organismo que vote por una iniciativa para prohibir el envío de armas ligeras al país caribeño y se sancione a los líderes de las pandillas que promueven la violencia en la isla.
Asimismo, el país asiático exige el fin inmediato de la violencia y la actividad criminal, el fin de los bloqueos de carreteras y la ocupación de edificios públicos.
A poco más de un año del asesinato del presidente Jovenel Moïse, Haití sigue sumergida en una espiral de violencia, inseguridad y de problemas económicos, refieren expertos y el pueblo haitiano.
En julio, la ONU informó que al menos 234 personas habían muerto o resultado heridas en por la violencia entre bandas rivales en el barrio de Cité Soleil.
De igual forma, el portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Jeremy Laurence, instó a las autoridades de Haití a garantizar la protección de los derechos fundamentales.