Este martes, el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, alertó que las secuelas provocadas por el conflicto en Ucrania podrían desatar una hambruna mundial, por lo que hizo un llamado a darle «una oportunidad a la paz».
Durante una rueda de prensa, Guterres señaló que «las repercusiones se están sintiendo en todo el mundo con el aumento vertiginoso de los precios de los alimentos, la energía y los fertilizantes, que amenaza con convertirse en una crisis mundial de hambre», declaró.
Del mismo modo, destacó que los países en desarrollo, que ya estaban «asfixiados bajo la carga del Covid-19», están «pagando un precio muy alto» a causa del conflicto.
"Es hora de acabar con esta guerra absurda".
Ante el sufrimiento, la destrucción y el horror de la guerra en Ucrania, @antonioguterres subraya que es hora de acabar con los enfrentamientos y darle una oportunidad a la paz. https://t.co/4RgTpzzW90 pic.twitter.com/8wp3ua2HGY
— Naciones Unidas (@ONU_es) March 23, 2022
La paz es “inevitable”
El secretario de la ONU apuntó sobre progresos desde el punto de vista de la diplomacia internacional, por lo que la paz es «inevitable» y «hay suficiente sobre la mesa para poner fin a las hostilidades ahora y para iniciar negociaciones serias en este momento».
De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, en inglés) Rusia y Ucrania «proporcionan el 19 % del suministro mundial de cebada, el 14 % del trigo y el 4 % del maíz», cifras que reflejan más de un tercio de la exportación global de cereales.
Además, ambas naciones son dos de los máximos proveedores de colza y aportan al mercado mundial el 52 % de las exportaciones de aceite de girasol.