La policía de Albuquerque en Nuevo México, Estados Unidos, confirmó este domingo la muerte de un adolescente durante la persecución de un equipo de Armas y Tácticas Especiales (SWAT) que funciona en varias fuerzas de seguridad de la nación norteamericana.
El joven identificado como Brett Rosenau murió por inhalación de humo y fue encontrado dentro de la vivienda una vez que cesaron las llamas, de acuerdo con medios internacionales.
El periodista Joshua Jered detalló a través de una publicación en Twitter que ”el equipo SWAT de Albuquerque allana una casa en busca de un presunto sospechoso de robo. El uso de Flashbangs molestos para sacar al sospechoso se encendió y envolvió la casa en llamas. Después del incendio, la policía encuentra el cuerpo de un niño de 14 años. Él no era el sospechoso”.
Albuquerque SWAT team raids house looking for an alleged robbery suspect. Using nuisance Flashbangs to get the suspect out ignited and engulfed the home in flames. After the fire, police find the body of a 14-year-old boy. He was not the suspect. pic.twitter.com/WwbrhPElt2
— Joshua Jered (@Joshuajered) July 10, 2022
Destacó la prensa local que el jueves por la mañana, la policía de Albuquerque perseguía a Qiaunt Kelley por violar su libertad condicional y lo encontraron en una vivienda del sureste de la localidad, no obstante, el ciudadano se atrincheró dentro de una casa.
Los funcionarios indicaron que Brett Rosenau también corrió hacia la casa, sin embargo, los oficiales usaron varias rondas de municiones para tratar de sacar a Kelley mientras el adolescente permanecía dentro de la residencia.
Tras el incidente que le produjo la muerte a un menor de edad, el jefe del Departamento de Policía de Albuquerque (APD), Harold Medina, argumentó que las municiones “han sido utilizados por el Departamento de Policía de Albuquerque durante décadas.
Medina dijo además que existía la posibilidad que las municiones hayan originado el incendio, en medio de una investigación que se inició para esclarecer las causas donde Kelley resultó con quemaduras.
“Hemos escuchado las historias de que es posible que estos puedan provocar incendios, pero nunca hemos experimentado eso aquí”, precisó.