Un profesor británico de 25 años que respondió voluntariamente al llamado del presidente de Ucrania, Volodymir Zelenski, cuando pidió a extranjeros que se unieran en armas y enfrentar a Rusia, regresó a su país luego de que le ofrecieran tan solo 230 dólares por combatir hasta el final del conflicto.
Jake Priday, tiene seis años de experiencia en el ejecito británico y ha participado en misiones en Kenia, Estonia e Irak.
Fue el pasado 3 de marzo, cuando se reunió con los empleados de la misión diplomática que descartó la idea, pues luego de debatir las estipulaciones del contrato, lo rechazó de manera inmediata y lo calificó como una “estratagema”.
Priday esperaba que el personal de la base en la que se alojaron evaluara sus respectivas habilidades para asignarles las tareas en función de sus especialidades, pero al contrario, los coordinadores explicaron que sería enviado directamente a la primera línea de combate tras una breve etapa de entrenamientos que incluían prácticas de tiro y lectura de mapas, entre otras habilidades.
«No tengo interés en ser un héroe o en morir», fue lo que les dijo Priday a los empleados ucranianos aL salir de este país.
«Para mí es engañoso. Te venden un sueño: ¡puedes ayudar al pueblo ucraniano!, pero luego te lanzan al peor lugar posible en una zona de guerra», afirmó Priday a la revista digital 1843.
Antes de regresar a su país, pidiendo aventones, logró convencer a otros 20 mercenarios a abandonar Ucrania. De acuerdo con declaraciones de los voluntarios, no les habían detallado las cláusulas contractuales antes de su llegada al país.