Moscú no teme ninguna restricción occidental adicional, incluidas las nuevas «sanciones del infierno» anunciadas por algunos políticos estadounidenses, dijo el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitry Medvédev, en una entrevista con los medios de comunicación rusos, incluido TASS.
“Realmente no tenemos miedo de esas sanciones. Esto no es una forma de hablar ni un golpe de pecho, es simplemente una declaración de lo que realmente está sucediendo”, sostuvo.
“Actualmente estamos ante sanciones ‘del infierno’. Bueno, no sé qué es, ni en qué consistirá. ‘Sanciones del infierno’, dicen. Por otro lado, recuerdo bien las palabras de mi colega Barack Obama quien, en 2015, creo, después de nuestro estancamiento por razones bien conocidas, con sanciones impuestas, pronunció una frase que recuerdo. Dijo que la economía rusa estaba «por los suelos». Bueno, ¿qué podemos (nosotros)? digamos, ¿dónde está Obama ahora? Retirado, como dicen, mientras nuestra economía prospera y avanza”, enfatizó Medvédev.
El desarrollo económico del país tiene sus problemas, «muchos», agregó el político. Sin embargo, «nada demasiado horrible le ha sucedido (a la economía), en algunas áreas de hecho ha mejorado aún más», señaló, mencionando la agricultura, donde las sanciones de Occidente han estimulado el desarrollo en particular, como ejemplo.
«Déjenlos utilizar (las sanciones) como retórica interna, para satisfacer a sus votantes o para su establecimiento político, en general», afirmó el vicepresidente del Consejo de Seguridad, agregando que las sanciones son algo permanente para Rusia.
En este sentido, indicó que “esas sanciones no nos son ajenas. Y ni siquiera me refiero al período más reciente, sino a la era soviética, contra la URSS. Ni siquiera estoy hablando de las razones ahora, (o) los antecedentes, ni estoy describiendo a la Unión Soviética en sí, esto es una cuestión de gusto y actitud. Pero contra la Unión Soviética, que es nuestra patria, se han introducido sanciones al menos diez veces por varias razones. Incluso contra el conocido gasoducto Urengoy – Pomary – Uzhgorod, etc. Lo que significa que todo esto no es nuevo», dijo.
Decisiones soberanas
El también expresidente de Rusia, Dmitri Medvédev, advirtió de que no es correcto hablar de la posibilidad de emplazar bases militares rusas en Cuba y Venezuela, porque este tipo de declaraciones provocan grandes tensiones, en una entrevista adelantada hoy por medios locales, destaca la agencia EFE.
«Considero que no es muy correcto hablar de este tema (el posible emplazamiento de bases rusas en Cuba y Venezuela), porque como regla ello provoca una tensión muy significativa, como mínimo en el ámbito económico», dijo.
Insistió que en que la instalación de bases militares en otros Estados «depende de las decisiones soberanas de esos países».
«Efectivamente, tenemos determinados acuerdos con algunos Estados sobre la presencia allí de nuestras tropas, como en Siria y otros países”, e insistió en la necesidad de “no adelantarse» y decir que Moscú quiere emplazar bases o que ya ha alcanzado acuerdos para ese fin.
«Es totalmente incorrecto. Esto provoca tensión en el mundo», recalcó.
«No podemos emplazar nada allí (…) simplemente porque ello debe corresponderse con su posicionamiento geopolítico, con sus intereses nacionales», señaló.
Las garantías de seguridad exigidas por Rusia incluyen poner freno a una mayor expansión de la Alianza, en particular a Ucrania y Georgia, el cese de toda cooperación militar con las antiguas repúblicas soviéticas y la retirada de las tropas y armamentos de la OTAN a las posiciones que ocupaban antes de 1997.
Estados Unidos y la OTAN respondieron formalmente este miércoles a las demandas de Rusia.
