El partido Movimiento al Socialismo (MAS) de Bolivia emitió el jueves una resolución declarando el estado de emergencia ante los planes derechistas de descrédito y agresión contra sus líderes y la conspiración contra el Gobierno de Luis Arce.
“Ante las acciones de rearticulación de la derecha golpista y antidemocrática de sus actores que hasta el día de hoy siguen impunemente conspirando contra el Gobierno democráticamente elegido, nos declaramos en estado de emergencia para la defensa de la patria”, establece el punto dos del documento del Ampliado Nacional del MAS.
En el acta la tolda del MAS denuncia que existe un “Plan negro” operado por la derecha boliviana y orquestado desde el exterior para incluso atentar contra la vida del presidente del movimiento, Evo Morales.
De acuerdo con el acta final del encuentro efectuado en Cochabamba, los integrantes del partido político exigen garantías y medidas de seguridad al gobierno nacional.
Asimismo, invitan al presidente Arce y al vicepresidente David Choquehuanca a una reunión con el MAS y el Pacto de Unidad, integrado por sectores sociales, para discutir temas internos y establecer una pauta política común ante las acciones derechistas.
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Luego del ampliado del #MAS-IPSP, la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, informó que se establecerá una reunión con el Presidente y Vicepresidente para fortalecer el Instrumento Político más grande de la historia del país. pic.twitter.com/jSGFymnSzg— Abya Yala Tv (@AbyaYalaBolivia) October 7, 2022
Piden destitución
A través del comunicado pidieron la destitución del ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, y del titular de Justicia, Iván Lima, “por sus claras posiciones contrarrevolucionarias”.
El MAS exige en el acta la suspensión del presidente de la Administradora Boliviana de Carreteras, Henry Nina, por presunta corrupción.
En el marco del desarrollo del ampliado, el gobernador de Santa Cruz, Fernando Camacho, lideraba un paro indefinido con rechazo al diálogo.
Apoyo a Arce
El lunes, se desarrolló una marcha multitudinaria de trabajadores de diferentes organizaciones sociales y vecinales a las puertas de la Gobernación de Santa Cruz, en la capital cruceña, en respaldo a la gestión del presidente Arce y rechazó la amenaza de un paro indefinido a partir del 22 de octubre.
Durante la marcha se pronunciaron discursos en contra de Camacho, impulsor del paro indefinido.
“No queremos paros, queremos trabajar y no permitiremos más corrupción, ni que nos roben la plata de salud”, dijo un trabajador al recordar el caso de supuestos cobros por la compra de insumos hospitalarios y contratos por parte del hombre de confianza de Camacho, el ex secretario de Salud de la Gobernación de Santa Cruz, Fernando Pacheco, quien se dio a la fuga.