Un juez de Misuri anuló este martes la condena contra Lamar Johnson, quien cumplió casi 28 años de la cadena perpetua por el supuesto asesinato de Marcus Boyd, en 1994, que siempre desmintió.
El afroamericano de 50 años cerró los ojos y sacudió ligeramente la cabeza mientras una mujer de su equipo legal le daba unas palmaditas en la espalda cuando el juez de circuito David Mason emitió el fallo que le devolvió la libertad.
This courageous prosecutor @StLouisCityCA was committed to righting a wrong no matter how long it took. She did it, and saved Lamar’s life. All gratitude to @stlcao! @fjp_org ‘I wanna see everything’: Lamar Johnson freed after 28 years in prison |… https://t.co/ut5vZx94jW via… https://t.co/4XgjRLAjAe
— Justice for Christopher Dunn (@JusticeforChri6) February 17, 2023
El juez señaló que tenía que haber «pruebas fiables de la inocencia real, pruebas tan fiables que realmente superen el estándar de claras y convincentes».
Proceso
En agosto de 2022, la fiscal del distrito, Kim Gardner, presentó un recurso en busca de la liberación de Johnson, lo que generó una audiencia en diciembre ante el juez Mason.
Gardner expresó en un comunicado que “los tribunales reparan un error anulando la sentencia del Sr. Lamar Johnson, después de su condena injusta en 1995 (…) Y lo que es más importante, celebramos con el Sr. Johnson y su familia su salida de la sala como un hombre libre».
La fiscalía general de Misuri argumentó en la audiencia de diciembre que Johnson debía permanecer en prisión. En este sentido, la policía y la fiscalía atribuyeron el asesinato a una disputa por dinero producto de drogas. Desde el principio, Johnson mantuvo su inocencia, diciendo que estaba con su novia a kilómetros de distancia cuando se produjo el crimen.
Gardner indicó que su equipo había llevado a cabo una investigación que concluyó que Johnson decía la verdad.
Sobre el asesinato
Marcus Boyd fue asesinado a tiros en el porche de su casa por dos hombres con pasamontañas el 30 de octubre de 1994. Johnson fue declarado culpable y condenado a cadena perpetua, sin embargo, un segundo sospechoso, Phil Campbell, se declaró culpable de cargos menores a cambio de una pena de siete años de prisión.
Johnson declaró en diciembre que la noche del asesinato de Boyd estaba con su novia, excepto por unos minutos en los que salió de casa de un amigo para vender drogas en una esquina a varias manzanas de donde fue asesinada la víctima.
La novia de Johnson en aquel momento, Erika Barrow, declaró que estuvo con Johnson toda la noche y dijo también que la distancia entre la casa de la amiga y la casa de Boyd habría hecho imposible que Johnson fuera y volviera en cinco minutos.
Para la liberación de Johnson ha sido clave la declaración de un testigo que se retractó de su testimonio y un preso de la cárcel que dice que fue él -y no Johnson- quien participó junto a Campbell en el asesinato, según refieren medios internacionales.