Este viernes inició el intercambio de prisioneros entre el Gobierno de Yemén y los rebeldes hutíes que controlan la capital del país, esto como parte de un acuerdo en el que participó el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
El primer avión despegó desde Saná, capital de Yemén, hacia Andén, donde el Gobierno tiene temporalmente su sede, dijo Jessica Moussan, responsable de prensa del CICR a la AFP.
El pasado mes de marzo, el Gobierno reconocido internacionalmente y los rebeldes hutíes llegaron a un acuerdo en Berna, Suiza, para intercambiar más de 880 prisioneros, entre ellos sauditas y sudaneses.
En octubre de 2020, se realizó la última operación de esta envergadura, cuando se liberaron más de mil prisioneros en 48 horas.
En enero de 2022, los rebeldes hutíes secuestraron un barco con bandera de los Emiratos Árabes Unidos frente a la costa de Yemen. Según la colación, el barco llevaba un hospital de campaña saudí desde la isla de Socotra, en Yemen, en el océano Índico, hasta Jazan, en el sur .
El golpe de Estado de los hutíes en 2014 desató una sangrienta guerra civil en Yemen, situación que ha sido descrita por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), como la peor crisis humanitaria del mundo.
En 2015, Arabia Saudita intervino en el vecino Yemen para respaldar a las fuerzas progubernamentales contra los hutíes, que en ocho años de conflicto se han apoderado de grandes extensiones de territorio en el norte y el oeste del país más pobre de la península arábiga.
La guerra ha causado una de las peores crisis humanitarias del mundo, con cientos de miles de muertos y millones de desplazados, con epidemias, falta de agua potable y hambre aguda. Más de tres cuartas partes de la población dependen de la ayuda internacional.