El presidente de Colombia, Gustavo Petro, desinfló las críticas de Iván Duque sobre supuestas negociaciones con narcotraficantes, al publicar una foto en la que el exmandatario aparece posando con el fallecido criminal, José Hernández Aponte, conocido como alias el «Ñeñe».
A este delincuente le fueron comprobados múltiples delitos, entre ellos: asesinato, lavado dinero, sicariato y vínculos con el pran del narcotráfico Marquito Gómez, lugarteniente de Kiko Gómez Cerchar.
https://t.co/aBzF0BDamv pic.twitter.com/nrmQhDrGwq
— Gustavo Petro (@petrogustavo) May 11, 2023
Los padres de Duque y Hernández eran amigos por lo que ambos personajes ya se conocían y compartían encuentros familiares.
Ñeñepolítica
Pero el escándolo llegó en 2020, cuando una investigación de la Fiscalía General de Colombia, abierta para esclarecer el homicidio del ´Ñeñe’, captó circunstancialmente conversaciones de éste en las que dice a sus interlocutores ser el eje de una operación de compra de votos en la Costa Norte para favorecer a Iván Duque, por orden del expresidente Álvaro Uribe.
En un audio filtrado que corresponde a la primera semana de junio de 2018, justo en la víspera de la segunda vuelta presidencial, Hernández habla con un interlocutor -cuya identidad no fue revelada- de haber pagado 50.000 pesos a cada votante en San Martín, Cesar.
Más vínculos
La vicepresidenta de Duque, Marta Lucía Ramírez, también estuvo en el centro de una agitada polémica por cuenta de un hecho que ocurrió en 1997 que involucró a su hermano Bernardo Ramírez, condenado por narcotráfico.
De acuerdo con una investigación periodística de La Nueva Prensa, basada en documentos oficiales de la justicia norteamericana, la entonces vicepresidenta pagó una fianza millonaria para sacar a su hermano, detenido por una operación para ingresar heroína a Estados Unidos (EE.UU.).