La asesora especial de la presidencia siria, Bouthaina Shaaban, señaló que los países occidentales no prestan la ayuda necesaria al Gobierno sirio que está haciendo frente a las secuelas del devastador terremoto que afectó a varías provincias de esta nación el pasado 6 de febrero.
«Desgraciadamente, Occidente solo se preocupa de las zonas donde están los terroristas, pero no se preocupa de las zonas en las que vive la mayoría de la población siria. La mayor parte del dinero y todo el material fue enviado a Türkiye desde Europa y Estados Unidos (EE.UU.), no se envió nada a Siria», denunció Shaaban.
Las declaraciones de la funcionaria siria surgen luego que Estados Unidos y Europa se negaran al levantamiento de las medidas coercitivas unilaterales que ejecutan contra este país, pese a las peticiones que han realizado organismos como la Media Luna Roja y la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja.
Desoyendo un clamor
Esta negativa ha sido cuestionada por diversos países tal y como lo reflejan las declaraciones de la portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Mao Ning, quien se sumó a las voces que exigen a EE.UU. “levantar sin dilaciones las sanciones unilaterales impuestas contra ese país y abrirle acceso a la ayuda humanitaria”.
“EE.UU. debería renunciar a sus ideas geopolíticas obsesivas”, enfatizó.
Asimismo, el jefe de la Cruz Roja Siria, Khaled Hbubati, instó a los países de Occidente a poner fin al bloqueo económico contra Damasco, para contribuir a una más rápida liquidación de las consecuencias del terremoto.
Pese a esta actitud, los principales países de Oriente Medio decidieron no plegarse a esta política y Egipto, Argelia, Túnez, Irak, Bahréin, Arabia Saudita, Omán, Catar y Emiratos Árabes Unidos se encuentran brindando ayuda al pueblo sirio para enfrentar esta tragedia donde se contabilizan cerca de dos mil muertos como consecuencia de los derrumbes.
