.
Redacción de Fuser News con información de RT.
Un total de 10 jóvenes presuntamente integrantes de la ‘primera línea’, como ha sido llamada la vanguardia de las manifestaciones antigubernamentales de Colombia, fueron enviados a la cárcel acusados de cometer hechos de vandalismo, terrorismo y ataques contra la fuerza pública entre mayo y agosto de este año.
La medida ha sido criticada por considerar que no ha sido aplicada con la misma contundencia contra los uniformados denunciados por violaciones de los derechos humanos.
Según la magistrada del juzgado 69 Penal Municipal de Bogotá con funciones de control de garantías, que tomo la decisión de manera virtual, consideró que hay “elementos materiales probatorios e información legalmente recopilada”, para inferir que los supuestos manifestantes están inmersos en los delitos de violencia contra servidor público, instigación a delinquir con fines terroristas, lanzamiento de objetos o sustancias peligrosas. Además, calificó a los judicializados como una amenaza para la sociedad.
Mientras se espera la condena, los jóvenes, que tienen entre 20 años y 30 años, fueron enviados a la Cárcel y Penitenciaria de Media Seguridad de Bogotá ‘la Modelo’ y la Cárcel de Mujeres del Buen Pastor, también en la capital.
Esta decisión, ha causado indignación a algunos usuarios de las redes quienes las califican de excesiva, debido a que consideran que la justicia no se aplicó con la misma dureza contra uniformados y paramilitares denunciados de arremeter contra los manifestantes.
Según el dirigente político y defensor de los DDHH, Iván Cepeda, de 80 asesinatos durante el paro nacional, en 61 estarían involucrados miembros del cuestionado Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad).