Este martes, fuerzas israelíes asesinaron a seis palestinos durante una redada en la sede de un grupo de combatientes, mientras que una veintena resultaron heridos en las operaciones realizadas en la Cisjordania ocupada, informó el Ministerio de Salud palestino.
El ente dijo que cinco de las personas murieron antes del amanecer en la ciudad Naplusa, y un sexto palestino falleció tras recibir una bala en el pecho en la localidad de Nabi Saleh, al norte de Ramala, donde el ejército israelí indicó haber «detectado un sospechoso que lanzaba un artefacto explosivo» en dirección a los soldados, que abrieron fuego.
El ataque por parte de las fuerzas israelíes se realizó bajo el argumento de «desmantelar un nuevo taller de fabricación de armas» que aseguran pertenece al nuevo movimiento de combatientes palestinos llamado «Guarida de los Leones (Aren al Usud, en árabe).
El primer ministro israelí, Yair Lapid, declaró en la radio pública Kan que uno de los dirigentes de este grupo, Wadih al Houh, había muerto. «Tienen que saber que los encontraremos allí donde estén, Israel nunca dejará de actuar por su seguridad y haremos lo que se tenga que hacer», aseguró el funcionario.
«La rendición es el camino de la humillación (…) Es el momento de que los leones salgan de su guarida», dijo en su canal de Telegram la milicia palestina «Guarida de los Leones», que cuenta con más de 210.000 abonados y goza de gran popularidad entre los jóvenes palestinos.
«Crimen de guerra»
El presidente palestino Mahmud Abas denunció como un «crimen de guerra» la operación israelí en Naplusa, dijo su portavoz Nabil Abu Rudeinah en un comunicado.
El martes en la noche, un israelí de 55 años resultó herido tras haber sido apuñalado por un «terrorista» cerca de Naplusa, afirmó el ejército. El autor del ataque huyó hacia el pueblo palestino de Al-Fundok, añadió.
Desde el 11 de octubre, Israel impuso un estricto asedio sobre la ciudad de Naplusa, la más poblada de Cisjordania, bloqueando las entradas de la urbe con puestos de control militar.
Estas restricciones se aplicaron después de un ataque de represalia llevado a cabo por la recién formada el grupo Guarida de los Leones en Nablus, en el que murió un soldado israelí el 11 de octubre.
El viernes pasado, el Parlamento Árabe demandó la inmediata intervención de la comunidad internacional para poner fin al estricto asedio impuesto por Israel sobre Naplusa, al que describió como “una flagrante violación del derecho internacional”.
Estas operaciones, registran el saldo mortal más alto en Cisjordania en casi siete años, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Según refiere de la AFP, una multitud participó en Naplusa en los funerales de los palestinos, entre ellos combatientes armados.
