Un comunicado de la Fiscalía General de Rusia solicitó a un tribunal de la Federación declarar a la tecnológica Meta como una organización extremista, al tiempo que pidió prohibir las actividades de esa empresa en el país.
“De acuerdo con la ley federal sobre la lucha contra la actividad extremista, la Fiscalía General de la Federación Rusa ha enviado una solicitud al tribunal para que declare a Meta Platforms Inc. como organización extremista y prohíba sus actividades en la Federación Rusa”, reseña el escrito.
Andy Stone, portavoz de Meta, explicó a medios occidentales el jueves (10/03) que la empresa levantó de manera temporal la prohibición de realizar llamados a la violencia contra los funcionarios públicos de Rusia, argumentando el hecho de que la nación eslava emprendió la operación militar especial de desnazificación en Ucrania.
Sin embargo, recoge The Washington Post, todavía restringe los llamados contra la población civil rusa.
“Como resultado de la invasión rusa de Ucrania, hemos permitido temporalmente formas de expresión política que normalmente violarían nuestras reglas, como un discurso violento como ‘muerte a los invasores rusos’. Todavía no permitiremos llamadas creíbles a la violencia contra los civiles rusos”, dijo el vocero.
Por su parte, el pasado 25 de febrero la Fiscalía General también pidió incluir a la red social Facebook en la lista de organizaciones implicadas en la violación de derechos humanos y libertades, por permitir llamados a la violencia contra los nacionales rusos en las recién independizadas repúblicas de Donetsk y Luganks.
Por ese motivo, el Servicio de Supervisión de las Telecomunicaciones, Tecnologías de la Información y Medios de Comunicación de Rusia restringió el acceso a Facebook y cerró toda comunicación con Twitter.
Desnazificación de Ucrania
Desde el 24 de febrero el presidente ruso, Vladímir Putin, inició una operación militar especial en Ucrania ante el “genocidio” que enfrentaban los ruso-parlantes en Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por el Kremlin como Estados soberanos.
Para el mandatario el objetivo central de esta operación es “la desmilitarización y la desnazificación” de Ucrania. En ese sentido, los ataques de las fuerzas armadas están dirigidos solo a instalaciones militares y no contra la población civil.