Varias industrias farmacéuticas anunciaron un cese de sus operaciones con Rusia, como otra medida sancionatoria contra el Gobierno del Kremlin, aunque con incidencias negativas en la salud del pueblo ruso.
La más reciente declaración de este tipo fue hecha por la farmacéutica estadounidense Eli Lilly, que decidió suspender las exportaciones de “medicamentos no esenciales” hacia el mercado ruso, sin detallar cuáles serán los fármacos retirados; al tiempo que destinará los fondos de sus operaciones con la nación eslava para enviar apoyo humanitario a Ucrania.
Un comunicado de la empresa señala que su presencia en Rusia “ahora está destinada únicamente a garantizar que las personas que padecen enfermedades como el cáncer y la diabetes sigan recibiendo los medicamentos necesarios”.
En esa misma línea, la gigante farmacéutica Novartis anunció el 4 de marzo que cumplirá con las sanciones impuestas por Estados Unidos y varias potencias occidentales contra Rusia.
“También hemos decidido suspender cualquier inversión en Rusia y detener todas las actividades de marketing comercial”, declararon en un comunicado. Aunque de manera contradictoria escriben en la misiva que su “enfoque siempre está en mejorar la salud humana a nivel mundial”.
Al concierto de las farmacéuticas se unieron la empresa Johnson & Johnson que cesó operaciones en Rusia y Bielorrusia, pero seguirá suministrando medicamentos esenciales a los dos países. Asimismo, Pfizer y Bayer restringieron el envío de medicinas con la nación eslava y cerrarán todos los negocios que tenían previstos en esa región.
Protección rusa
Para proteger al pueblo ruso de las acciones unilaterales contra el suministro de medicamentos, el pasado 8 de marzo el primer ministro de la Federación, Mijaíl Mishustin, prohibió de manera temporal la exportación de dispositivos médicos extranjeros producidos en Rusia.
El medio ruso RBC explica que esta prohibición se aplica a los dispositivos médicos recibidos de aquellos países que impusieron sanciones a Rusia. Esta decisión ayudará a prevenir la escasez de dispositivos médicos en el país.
