El expresidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, fue sentenciado este miércoles a 16 años de prisión por casos de corrupción durante su gestión entre el 2012 – 2015, junto a su exvicepresidenta Roxana Baldetti.
El expresidente de Guatemala Otto Pérez Molina es declarado culpable de asociación ilícita y defraudación aduanera, en uno de los casos más emblemáticos de la extinta comisión contra la impunidad de las Naciones Unidas en Guatemala.
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— AP Noticias (@AP_Noticias) December 7, 2022
El Tribunal de Mayor Riesgo “B” de Guatemala absolvió a ambos exfuncionarios del cargo de enriquecimiento ilícito, sin embargo, fueron declarados culpables por los delitos de defraudación aduanera y asociación ilícita, por lo que tendrán que pagar una multa de más de un millón de dólares.
El caso fue uno de los más emblemáticos de la extinta comisión contra la impunidad de las Naciones Unidas en Guatemala y obligó a Pérez Molina a renunciar al cargo en 2015 antes de finalizar su período presidencial y desde entonces se encuentra recluido, el último año bajo arresto domiciliario.
Tras conocer la sentencia, el exmandatario guatemalteco aseguró que “es mentira. Nunca nadie dice que yo haya dado una orden ilegal y nunca la di, nunca dicen que a mí me entregaron dinero. Me siento decepcionado y frustrado”. Señaló además que es inocente y probará que se trata de un supuesto caso fabricado en su contra.
El Tribunal estableció la existencia de estructura criminal interna y externa, la cual tenía el objetivo de defraudar a la nación a través de los centros aduaneros declarando de manera inexacta las mercancías comerciales.
A partir de ello, fueron sancionados otros 16 integrantes de la estructura, así como exfuncionarios y exempleados aduaneros a penas correspondientes que oscilaron entre los 7 y 13 años de prisión.
«La Línea»
La prensa internacional destaca que el caso, conocido como “La Línea” y que ha tardado siete años para llegar a un veredicto, se llevó a cabo de manera conjunta por la entonces Fiscalía Especial Contra la Corrupción (FECI) y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).
Durante una jornada de casi diez horas, las jueces del tribunal integrado por Janeth Valdés, Katty Sarceño y Marling González expusieron el caso, en el que la presidenta Valdés aprovechó para arremeter contra la Comisión de la Organización de Naciones Unidas, argumentando que el organismo había hecho un trabajo deficiente y que en el país “no necesitamos de extranjeros que vinieran a hacer el trabajo”. No obstante, posteriormente dio valor a la investigación que la ONU realizó, refiere la agencia AP Noticias.