El expresidente de Bolivia, Evo Morales, denunció el jueves un nuevo plan para atacar a los dirigentes del Movimiento al Socialismo (MAS), a través de una “guerra sucia” contra el partido gobernante, tras el robo de su teléfono durante un acto electoral.
“Por responsabilidad hacemos conocer a nuestro pueblo que está en marcha un plan para defenestrar a la dirigencia nacional del MAS-IPSP con guerra sucia, montajes y falsas acusaciones en redes sociales. Esta arremetida se ejecuta con la complicidad de algunos medios de derecha”, escribió Morales en su cuenta en la red social Twitter.
Por responsabilidad hacemos conocer a nuestro pueblo que está en marcha un plan para defenestrar a la dirigencia nacional del MAS-IPSP con guerra sucia, montajes y falsas acusaciones en redes sociales. Esta arremetida se ejecuta con la complicidad de algunos medios de derecha.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) September 1, 2022
Afirmó que los “neoliberales golpistas” armaron innumerables juicios, persecuciones, amenazas y atentados en contra la dirigencia del MAS, al tiempo que recordó que fueron expulsados del Parlamento por orden de la embajada de Estados Unidos con falsas acusaciones. Mientras tanto, el MAS avanza y se fortalece a pesar de los ataques de la “derecha interna y externa”.
“Con apoyo del pueblo trabajador y humilde derrotamos esos ataques para refundar Bolivia”, aseveró el expresidente indígena.
Indicó que el único «delito» para los enemigos de la Patria «es defender a los más pobres, excluidos y vilipendiados, nos odian porque hablamos con la verdad y trabajamos por la dignidad de nuestras hermanas y hermanos de la Bolivia profunda”.
El expresidente boliviano denunció el lunes el robo de su teléfono celular, durante un evento de su partido político celebrado el domingo en un poblado del departamento de Santa Cruz (este), en el que se encontraba el ministro de Interior, Eduardo del Castillo.
Estas acusaciones se suman a otras realizadas en los últimos días a causa del episodio del celular, por lo que cuestionó el accionar del ministro del Castillo, quien le respondió alegando que no constaba denuncia alguna.
Con anterioridad, Morales manifestó sus críticas públicas al desempeño del ministro del Interior y su partido MAS pidió al presidente Luis Arce su destitución.