Bajo el lema “esta crisis no la paga la clase trabajadora. Salario o conflicto”, cerca de 50.000 personas se reunieron este jueves en la plaza Mayor de Madrid, España, para exigir las subidas salariales, tras ser convocadas por dos grandes sindicatos de ese país.
Los sindicatos salieron a las calles para exigirle a la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) una subida de los sueldos de acuerdo con el incremento de la inflación.
La Confederación Sindical de Comisiones Obreras (C.S. de CC.OO.) y la Unión General de Trabajadores (UGT) fueron los sindicatos encargados de convocar la marcha que partió de tres puntos diferentes: Atocha, Plaza de España y Puerta de Toledo, finalizando en la Plaza Mayor.
Muchos de los manifestantes, procedentes de Cataluña, Castilla y León, Galicia, País Vasco, Aragón o Andalucía, portaron pancartas con mensajes como “es inflación, grita el ladrón, Stop carestía, robo día a día o Trabajo digno”.
Inflación superó 7%
En el mes de octubre, la inflación superó el 7% interanual. A pesar de que se trata de una de las más bajas de la zona euro, que de media sobrepasa el 10%, esta cifra está lejos de la revalorización de las remuneraciones de los trabajadores.
Tras las protestas, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, advirtió en reiteradas ocasiones que el Gobierno subirá el salario mínimo interprofesional (SMI), incluyendo el impacto de la inflación.
Díaz aboga por una subida salarial general, mientras expresó que hay que acabar con “una enorme deficiencia” que arrastra España: “Tiene salarios demasiado bajos”.
Las declaraciones de la vicepresidenta y su apoyo al pedido de subida salarial por parte de los sindicatos hicieron que el presidente de la patronal Antonio Garamendi, acusara a Díaz de ir «en conjunto» con UGT y CCOO.
Garamendi salió en defensa de los empresarios y lamentó que se les esté convirtiendo «en diana» de los males del país.
Esta es la última concentración del calendario programado, la primera movilización se produjo el pasado 7 de octubre, ante la sede de la CEOE, con la misma proclama, «Salario o conflicto», a la que siguieron las visitas de los secretarios generales a distintos puntos del país para participar en asambleas informativas en las empresas.
