El entrenador de la selección masculina de fútbol de España, Luis de la Fuente, pidió disculpas su por aplaudir al presidente de la Federación, Luis Rubiales, durante la polémica asamblea en la que este se negó a dimitir.
De la Fuente, conocido por su intachable historial como entrenador durante 26 años, recalcó que siempre estuvo del lado de la igualdad y reconoció que las críticas son merecidas.
El entrenador explicó que asistió a la asamblea convencido de que era un acto de despedida de Rubiales, pero que la situación se transformó en algo imprevisto para lo que no estaba preparado.
Cuando los periodistas le preguntaron si consideraba renunciar tras los ataques de la opinión pública, el seleccionador declaró que no, que creía que su error era humano y que lo correcto era pedir disculpas.
La polémica no se limita a este episodio. El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) tiene previsto pronunciarse este viernes sobre las denuncias presentadas por el Gobierno contra Rubiales por su comportamiento tras la victoria de la selección española en el Mundial femenino.
El TAD debe determinar si califica el beso como no consensuado a Jennifer Hermoso y sus gestos en el palco como infracciones graves o muy graves. En caso de ser consideradas muy graves, el Consejo Superior de Deportes podría instar a la suspensión de Rubiales como presidente de la Federación.
Por otra parte, la ministra de Ciencia e Innovación en funciones, Diana Morant, reiteró su condena al comportamiento de Rubiales, afirmando que «no representa los valores del deporte».
La ministra subrayó que el beso forzado a Jennifer Hermoso, así como sus actos no reflejan los valores de igualdad que España promueve. La ministra también enfatizó la importancia del «respeto a las mujeres en cualquier ámbito».