El fondo de inversión Rosemont Seneca de Hunter Biden, hijo del presidente estadounidense Joe Biden, financió el programa biológico militar del Pentágono en Ucrania, dijo Igor Kirillov, jefe de las fuerzas de defensa contra la radiación, química y biológica de las Fuerzas Armadas rusas durante una rueda de prensa.
Los documentos, a los que accedió el ejército ruso, nos permiten rastrear el patrón de interacción entre las agencias gubernamentales de EE.UU. y los objetos biológicos ucranianos, señaló el teniente general.
“Al mismo tiempo, existe una estrecha relación entre el fondo (Rosemont Seneca. — Ed.) y los principales contratistas del ejército estadounidense, incluido Metabiota, que, junto con Black y Veach, es el principal proveedor de equipos para el Pentágono y biolaboratorios de todo el mundo”, añadió Kirillov.
Destacó que el fondo de inversión de Hunter Biden tiene recursos por un monto de al menos $2,400 millones.
El Ministerio de Defensa llegó a la conclusión de que la prioridad de los Estados Unidos en el trabajo de los laboratorios biológicos ucranianos era el estudio de un patógeno de ántrax particularmente peligroso.
«No solo se exportaron muestras de tejido y suero sanguíneo humano, sino también patógenos peligrosos. Así, se enviaron más de diez mil muestras al centro de Lugar en Georgia. Los destinatarios también incluyeron laboratorios de referencia en el Reino Unido y el Instituto Löffler en Alemania»,dijo el portavoz de la defensa rusa.
Kirillov señaló que la exportación de patógenos al exterior crea el riesgo de fugas de «información genética sensible», así como amenazas a la seguridad biológica no solo para Ucrania, sino también para aquellas regiones donde se transfirieron las muestras, refiere Ria Novosti.
Recordó ejemplos cuando el trabajo del departamento militar estadounidense con el agente causante del ántrax terminó en situaciones de emergencia. Por ejemplo, entre 2005 y 2015, se enviaron esporas de ántrax viables desde el sitio de pruebas de Dugway del Ejército de EE. UU. a 194 destinatarios en diez países de todo el mundo.
Además, Rusia recibió documentos que confirman que Estados Unidos probó drogas no probadas en militares ucranianos.
«Estamos hablando de un sistema de detección para productos farmacéuticos Deep Drug que no han pasado el procedimiento de licencia en los EE. UU. y Canadá. <…> Los patrocinadores estadounidenses son particularmente cínicos en el hecho de que el desarrollador, Scymount, se ofreció a comprar este sistema sobre una base comercial, a pesar de que los empleados del Ministerio de Defensa de Ucrania atrajeron personal militar como voluntarios», agregó Kirillov.
Aclaró que tales trabajos están prohibidos en Estados Unidos, por lo que el Pentágono los realiza fuera del país. Más de cuatro mil personas participaron en la investigación dentro del proyecto UP-8 y, según datos publicados en los medios búlgaros, unos 20 soldados ucranianos murieron y 200 fueron hospitalizados solo durante los experimentos en el laboratorio de Kharkov.
En total, según el Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Estados Unidos controla 336 laboratorios biológicos en 30 países, agregó Kirillov, quien pidió aclaraciones a Washington sobre los verdaderos objetivos de su trabajo.
