Redacción Fuser News con información de Business Day 

Los informes indican que las conversaciones entre el gobierno de Venezuela y la oposición, celebradas en la Ciudad de México, avanzan en la dirección correcta. Las «posiciones de las dos partes se acercaron en la búsqueda de soluciones a los desafíos en asuntos sociales, económicos y políticos», dijo un comunicado leído por el mediador noruego Dag Nylander.

No se han hecho públicos los detalles, pero existe la creencia real de que las partes negociadoras están trabajando hacia una conclusión pacífica inclusiva. Los delegados del gobierno del presidente Nicolás Maduro están presionando para que se levanten las medidas coercitivas unilaterales extranjeras, mientras que la oposición quiere garantías de elecciones regionales justas programadas para noviembre en todo el país.

Aunque el presidente Maduro no está personalmente en las conversaciones, estas desafiantes negociaciones tienen mucho en juego. La clave para el pueblo venezolano es poder acceder a recursos básicos que actualmente se les niegan debido a las medidas coercitivas que muchos en el bando del presidente Maduro señalan que Naciones Unidas se refiere como “sanciones ilegales” impuestas por Estados Unidos.

Chris Murphy vs. Departamento de Estado

Recientemente, el senador Chris Murphy ofreció una acusación más condenatoria en una audiencia del Senado cuando se dirigió al representante especial del Departamento de Estado de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, “todo lo que hicimos fue jugar todas nuestras cartas el primer día y no funcionó. Y ha sido un error vergonzoso tras otro desde entonces».

El papel de Cabo Verde en esta escena diplomática multipartidista es una prueba aún más para muchos en el campo del presidente Maduro de la naturaleza política del golpe de Estado de Estados Unidos contra Venezuela. El diplomático venezolano Alex Saab se encuentra actualmente detenido de manera ilegal en Cabo Verde.

El diplomático venezolano Alex Saab fue detenido desde el 12 de junio de 2020, a pesar de que el Tribunal de Justicia de la Cedeao dictaminó, el 15 de marzo y nuevamente el 24 de junio, que su detención fue ilegal y arbitraria y que debía ser puesto en libertad de inmediato. Además, el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, la Unión Africana y varios Estados, incluidos países africanos, también solicitaron a Cabo Verde que libere al funcionario del país bolivariano.

Peor que un prisionero de guerra 

Algunos observadores han descrito la detención de Alex Saab en Cabo Verde como «Peor que lo que se le puede imponer a un prisionero de guerra«.

Los expertos creen que Cabo Verde está violando abiertamente el derecho internacional, los derechos humanos e incluso el derecho interno, habiendo decidido que el flujo de inversión prometido de los Estados Unidos es más importante para la pequeña nación africana que el cumplimiento de las obligaciones del tratado.

Muchos afirman que una inversión de 400 millones de dólares prometida por Estados Unidos en el país es una compensación a cambio de que Cabo Verde aceptara detener y extraditar al diplomático Alex Saab.

Sin estado de derecho no hay inversión

Asimismo, en una encuesta reciente, el 65% de los caboverdianos encuestados apoyó esta opinión: «Cabo Verde depende en gran medida del capital extranjero y las remesas de la diáspora, ya que los flujos generados por la economía caboverdiana nunca han sido suficientes para financiar su desarrollo», comentó Carla Monteiro, de Carla Monteiro & Associates, un bufete de abogados de Cabo Verde.

La abogada caboverdiana agregó que “debido a diversas limitaciones como la falta de recursos naturales, el déficit de la balanza comercial y el tamaño y división del territorio, cualquier promesa de flujos de entrada será agarrada con ambas manos”.

Cabe destacar que la liberación inmediata de Saab se ha convertido en una causa panafricana célebre. El Tribunal de Justicia de la Cedeao, la Unión Africana y muchos países vecinos se alinearon contra Cabo Verde, lo que lo deja enfrentando serios desafíos políticos y de reputación al archipiélago africano. Muchos creen que su postura actual es un juego de poder por parte de Estados Unidos utilizando al país como un peón en un juego de ajedrez tridimensional, con el cambio de gobierno en Venezuela a toda costa como el objetivo final de Estados Unidos.

Los intereses de Paulo Rocha

Fuentes confiables también señalan al ministro del Interior de Cabo Verde, Paulo Rocha, de inclinar un país que alguna vez fue democrático a un estado casi desterrado. Fuentes cercanas al gobierno de Cabo Verde informaron recientemente que Rocha se reunió con el presidente saliente, Jorge Carlos Fonseca, socavando la autoridad del presidente Fonseca al afirmar que él, Rocha, “ha estado a cargo del asunto Alex Saab desde el primer día y yo no me rindo” y que Fonseca debe centrarse en “una salida elegante en lugar de entrometerse en los asuntos políticos que no le conciernen.

Muchos observadores políticos de Cabo Verde consideran a Rocha como el «ejecutor de los estadounidenses y el hombre de adentro», y algunos llegan a describirlo como «un espía con una personalidad sádica».

Paulo Rocha no tiene jefe

Otro ejemplo de la influencia de Rocha lo citan fuentes en la isla de Sal que dicen que recientemente hizo una visita allí para ordenar directamente a la Policía Nacional que custodia a Alex Saab que se asegure de que «bajo ninguna circunstancia Saab sea trasladado a Praia».

Esto en relación con una sentencia del 31 de agosto del Tribunal de Apelación de Barlovento que autoriza el traslado de Saab a la capital, donde puede recibir una mejor atención médica dado que es un paciente de cáncer. Esto representa “[Un] abuso de poder claro y evidente, abuso de proceso y obstrucción a la justicia”, según una fuente cercana al gobierno.

Igualmente, muchos se preguntan ¿qué es lo que motiva?, a Rocha, a comportarse de esta manera. ¿Qué es lo que Estados Unidos tiene sobre él? ¿Lavado de dinero? ¿Corrupción? ¿Narcotráfico?