Este viernes, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos (EE.UU.) sancionó nuevamente a Irán, específicamente al Ministerio de Inteligencia de la nación persa y su titular, Seyed Esmail Jatib, acusándolos de supuestas actividades cibernéticas contra Washington y sus aliados.
El texto acusa a Irán de estar vinculado a un ataque cibernético en julio contra Albania, país que alberga a un notorio número de miembros del grupo terrorista antiraní Muyahidín Jalq (MKO, en inglés).
Con base en estas acusaciones calificadas como «infundadas» por Irán, este miércoles Albania rompió relaciones diplomáticas con el país persa, ordenando a los diplomáticos iraníes y al personal de la embajada su retirada en 24 horas.
The Iranian MOFA issued a statement to strongly condemn the #Albanian government’s anti-Iran measure. pic.twitter.com/3niDeWUSdl
— Foreign Ministry, Islamic Republic of Iran 🇮🇷 (@IRIMFA_EN) September 8, 2022
La Cancillería iraní calificó como “imprudente y miope” la decisión de Albania y afirmó que es una de las naciones que ha si de ciberataques a la propia infraestructura crítica, por lo que «rechaza y condena cualquier uso del ciberespacio como herramienta para atacar la infraestructura crítica de otros países”.
https://twitter.com/IRIMFA_EN/status/1567908671811616768?t=Oh-uk5Pl1UjCsBQKXI4sTw&s=19
Asimismo, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán desestimó las acusaciones infundadas vertidas por el gobierno albanés, y consideró que la decisión del país de estrechar los lazos políticos con Irán basándose en tales afirmaciones infundadas es «desmedida y poco previsora» en las relaciones internacionales.
Huellas de EE.UU.
La diplomacia iraní criticó los movimientos políticos registrados inmediatamente después del anuncio del Gobierno albanés, como el comunicado de EE.UU. y la pronta reacción de los “medios sionistas”, considerando que son evidencia de que existe un “plan prediseñado para crear una atmósfera política contra la república de Irán”, afirmó un comunicado.
Albania alberga a un notorio número de miembros grupo terrorista antiraní Muyahidín Jalq (MKO), por lo que Teherán lamenta que Tirana haya sido influenciada por terceros en sus decisiones inapropiadas.
En este caso, como en otros similares, se puede ver las huellas de EE.UU.; de hecho, Washington alega que, luego de semanas de investigación, concluyó que Irán estuvo detrás del ciberataque del pasado 15 de julio.