Puerto Rico, un estado no incorporado a Estados Unidos (EE.UU.) salió oficialmente de la quiebra este martes, luego de reestructurar la mayor deuda pública en la historia, casi siete años después de anunciar que no podía pagar los más de 70.000 millones de dólares pendientes.
Esta salida de la bancarrota implica que el gobierno estadounidense reanudará los pagos a sus acreedores por primera vez en varios años y hará frente a deudas pendientes por valor de unos 1.000 millones de dólares presentados por residentes y negocios locales.
También se prevé la emisión de más de 10.000 millones de dólares en bonos y que el Gobierno restablezca hasta 1.300 millones tomados de un sistema público de pensiones, refiere la agencia AP.
Plan aprobado hasta el 2048
El plan de reestructuración fue aprobado en enero por un juez federal. El mismo reduce las reclamaciones contra el gobierno puertorriqueño de 33.000 millones de dólares a apenas 7.400 millones de dólares. Siete centavos de cada dólar de los contribuyentes irán a cubrir deudas, en comparación con los 25 centavos anteriores.
Más allá de la «buena noticia», ese Estado caribeño deberá lidiar con las deudas pendientes hasta el 2048, año en que está prevista la culminación del plan.
“Esto es un momento trascendental”, dijo el gobernador Pedro Pierluisi. “El plan no es perfecto (…) pero tiene muchas cosas buenas”.
El plan también deposita 1.500 millones en los sistemas de pensiones públicas y crea un fondo de pensiones que se financiará con más de 10.000 millones de dólares en los próximos años.
La isla caribeña acumuló más de 70.000 millones de dólares en deuda pública y más de 50.000 millones en pensiones públicas pendientes tras años de corrupción, mala gestión y endeudamiento excesivo.
