Redacción Fuser News con información de Telesur
La presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) de México, Rosario Piedra, reconoció el miércoles que las desapariciones forzadas en su país son una “asignatura pendiente» para el Estado mexicano.
«El Estado mexicano tiene una asignatura pendiente con las víctimas de desapariciones forzadas y con sus familiares, tanto en aquellos casos cometidos por agentes estatales como en los que son responsabilidad de particulares», señaló la presidenta del organismo de derechos humanos.
Durante una reunión con el Comité contra la Desaparición Forzada de la ONU, celebrada en la sede de la cancillería mexicana, Piedra advirtió de la existencia de una debilidad institucional para enfrentar la crisis de desapariciones y afirmó que para superarla se deben cambiar los esquemas heredados de gobiernos anteriores.
También comentó que se debe establecer un marco normativo mínimo idóneo, la realización de un reporte nacional de personas desaparecidas y no localizadas, además de la creación del Mecanismo Extraordinario de Identificación Forense.
La funcionaria consideró urgente abordar la deuda histórica que tienen las instituciones con las víctimas de la represión política, específicamente durante la guerra sucia, un período de represión policial y militar contra la disidencia política que causó centenares de desapariciones forzadas entre los 60 y los 80.