Un donante de semen de 41 años, identificado como Jonathan M., enfrenta una demanda por parte de la fundación holandesa Donorkind, la cual le atribuye la paternidad de la escandalosa cifra de 550 hijos en Países Bajos y varios países europeos, incluyendo España.
La fundación le acusa de irrespetar el límite de 25 hijos fijado por la nación europea en los tratamientos de fertilidad, y pide que sean destruidas las muestras seminales que ya están almacenadas, conservando únicamente las reservadas para las mujeres que ya tuvieron un hijo a partir de su esperma y desean darle un hermano genético, informó El País.
Para el año 2017, la Asociación de Ginecólogos y Obstetras advirtió que el donante tenía ya 102 hijos con la mediación de 11 clínicas, por lo que estaba en una lista negra en su país de origen. Jonathan M. optó por ofrecer sus servicios a través de internet y en el extranjero.
Un holandés donante de semen de 41 años ha sido demandado por una fundación que facilita el encuentro de los hijos y hermanos nacidos en esta práctica. Le atribuye la paternidad de 550 niños en Países Bajos y en otros países. Ha donado también en España https://t.co/wG9YPBx6QZ
— EL PAÍS (@el_pais) March 28, 2023
Mark de Hek, abogado de Donorkind, subrayó en un comunicado que la actuación del donante «es ilegal porque pone por delante su afán procreador». El jurista señala que su actuación viola «los acuerdos con las clínicas y los futuros padres, que se fiaron de que solo tendría 25 hijos máximo».
TW : Zaaddonor die honderden kinderen verwekte moet stoppen, eist Stichting Donorkind: Volgens advocaat Mark de Hek handelt de donor onrechtmatig: 'Deze handelwijze is gevaarlijk voor het mentale welzijn en de gezondheid van donorkinderen. Door zijn… https://t.co/GQPo7bhc7B pic.twitter.com/KEPhprN5i6
— Stigmabase | UNIONE (@StigmabaseD) March 25, 2023
Límites de donación
Ties van der Meer, presidente de Donorkind, señala que el propio donante, «residente en La Haya, calcula que 550 es la cifra de hijos que puede tener, y ha acudido también en persona al extranjero”.
A la actual demanda se sumó “Eva”, una madre que en 2018 tuvo un bebé con ayuda del semen de este sujeto. «Si hubiera sabido que tenía ya más de 100 hijos, nunca le habría elegido. Cuando pienso en las consecuencias de todo esto para el mío me pongo mal: ¿cuántos más acabarán añadiéndose? La única forma de conseguir que pare es llevarlo a los tribunales», cita el documento.
La cifra máxima de 25 hijos por donante de semen se fijó para evitar posibles incestos involuntarios en la edad adulta, y para preservar su salud mental ante la posibilidad de tener tantos hermanos de familias distintas.
Cómo funciona
Las clínicas holandesas de fertilidad pagan a los hombres entre 10 y 20 euros por cada donación. Están legalmente obligadas a consignar en un registro nacional la información relativa a las donaciones de óvulos, semen y embriones, y ponerla a disposición de hijos, padres y médicos de cabecera. Desde 2004, los hijos que lo deseen pueden pedir esos datos a partir de los 16 años.
El Parlamento analiza ahora un proyecto de ley que cifra en 12 el máximo de familias -dentro y fuera de Países Bajos-con las que pueda colaborar un mismo donante. El problema es que las clínicas del sector no comparten sus datos entre ellas, y la falta de comunicación entre ellas facilitó la relación entre Jonathan M. y una decena de organismos sin levantar sospechas.