La vicepresidente Ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, llegó este martes a Países Bajos para participar, en La Haya, en las audiencias sobre las objeciones preliminares presentadas por el país suramericano contra la demanda unilateral de Guyana ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), relacionada con el Territorio del Esequibo.
La información fue difundida en la cuenta Twitter de la Vicepresidenta venezolana, quien a su llegada fue recibida por representantes de la Cancillería del país ubicado al noreste de Europa, donde se encuentra el Tribunal Internacional de Justicia.
Fuimos recibidos por la Cancillería de Países Bajos en La Haya para participar en las audiencias sobre las objeciones preliminares, presentadas por Venezuela contra la demanda unilateral de Guyana ante la Corte Internacional de Justicia. El Sol de Venezuela nace en el Esequibo! pic.twitter.com/ctqmoLKRCf
— Delcy Rodríguez (@delcyrodriguezv) November 15, 2022
El 18 de diciembre de 2020, el Gobierno de Guyana introdujo ante la CIJ una demanda unilateral por la disputa del Territorio del Esequibo, cuya decisión Venezuela rechaza por sus graves errores e irregularidades.
La Cancillería venezolana presentó una objeción ante la CIJ por esta acción y exige que la demanda de Guyana no sea admitida porque hay carencias de elementos para que se conforme un debido proceso.
Venezuela ha reafirmado expresamente su posición histórica de no reconocimiento de la jurisdicción de la Corte para conocer la controversia territorial sobre la Guayana Esequiba, destacado la vigencia del Acuerdo de Ginebra de 1966, para alcanzar un arreglo práctico y mutuamente satisfactorio para las partes, mediante negociaciones amistosas.
Además, el Gobierno de Venezuela reiteró que no existe base de jurisdicción para este caso dado que nunca otorgó su consentimiento y muchísimo menos respecto a la demanda unilateral de Guyana que lesiona el sentido, propósito y razón del Acuerdo de Ginebra.
Venezuela y Guyana se disputan la tenencia del Esequibo desde hace más de un siglo. La controversia volvió a tener relevancia luego del hallazgo de un gran yacimiento de petróleo en el mar territorial en disputa.
En febrero de 2021, el Gobierno venezolano denunció la instigación y la indebida intromisión de la dolosa ambición de las trasnacionales energéticas en esta controversia sobre “tan vasto territorio pleno de diversidad biológica y recursos naturales, que amenaza la vida planetaria, la paz y la seguridad regional”, refiere un comunicado emitido por la Cancillería del país suramericano.
En ese momento, el Gobierno Bolivariano refirió que “Venezuela advirtió que esta decisión originó una situación de hecho cuyas consecuencias debe ponderar con el tiempo suficiente, de modo que los derechos soberanos de la República estén al mejor resguardo tal y como lo mandata la Constitución”.