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DEA: una agencia promotora de terrorismo, guerra y narcotráfico | Por Johan Pérez

Fuser News

21/02/2022
DEA
El papel de la Administración de Control de Drogas (DEA), como organización antidroga, promueve e impulsa lo que en realidad dice erradicar

O. Gallardo

A pesar de que en el año 1973 la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos nació como entidad extraterritorial para combatir la propagación y tráfico ilícito de drogas, en contraparte vemos cómo regiones del país norteamericano comienzan a flexibilizar el consumo de sustancias psicotrópicas y alucinógenas.

Bajo este esquema, el Gobierno de Estados Unidos nos vende una política exterior “preocupada” por luchar contra el narcotráfico ingeniándosela con distintos mecanismos e instituciones para lograr su objetivo implícito: Influir en los gobiernos con medidas acordes a sus intereses socavando la soberanía y violando la Carta de las Naciones Unidas.

Además de ello se debe resaltar que las “colaboraciones” que la DEA dice llevar a cabo en Latinoamérica, muestran resultados completamente distintos, destapando diversos escándalos en países de la región, así como el aumento progresivo de tráfico de drogas en distintos países, siendo la cabeza Estados Unidos.

Colombia encabeza el narcotráfico en Latinoamérica

De acuerdo con los recientes informes de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), en países como Colombia se ha evidenciado un aumento progresivo de cultivo y tráfico de drogas.

Estos recientes informes demuestran que el papel de la DEA, como organización antidroga, promueve e impulsa lo que en realidad dice erradicar. Muestra de ello fue el caso de Juan Pablo Mosquera, quien siendo agente y colaborador de esta Agencia estadounidense se dedico a apoyar a los carteles del narcotráfico en Colombia para tiempo después ser llevado ante la justicia norteamericana por haber filtrado información desde dicha organización.

Pese a que la prensa trato de matizar el caso para lavar la imagen de la DEA, el Inspector General indicó que “la supervisión que hace la DEA de sus SIUS (colaboradores de la Unidad de Investigaciones Delicadas) es insuficiente» y dijo que «la agencia no aprendió las lecciones derivadas de una década de publicitados escándalos”.

¿Qué paso con Salvador Cienfuegos?

Es de recordar que Salvador Cienfuegos Zepeda, quien en su momento fue secretario de Defensa Nacional en México, estuvo expuesto a delitos asociados al narcotráfico y lavado de activos. Estas acusaciones fueron hechas por la DEA, señalando que habría ayudado al cártel de los hermanos Beltrán Leyva a traficar cocaína, heroína, metanfetaminas y marihuana a Estados Unidos.

Sin embargo, luego fue absuelto de dichos cargos por parte de la justicia estadounidense, cosa bastante curiosa. De ello se puede destacar la nota de prensa del 19 de noviembre de 2020, presentada por el portal de noticias elfinanciero.mx, donde se señala que el “el militar mexicano quedó limpio de cargos criminales en Estados Unidos”.

Más adelante, la misma nota expresa la poca disposición y diligencia de la justicia norteamericana contra este ex funcionario del Gobierno mexicano, pues la jueza del Distrito Este de Nueva York, Carol Bagley Amon, afirmó tener «autoridad limitada» y que «es difícil hacer que el gobierno procese a alguien a quien no quiere procesar», avalando absolver a Cienfuegos de los cargos que se le habían imputado en los Estados Unidos.

Con esta medida se demuestra la poca credibilidad de Estados Unidos en dos aspectos que vale la pena resaltar:

Por un lado, se destaca el papel de un sistema de justicia completamente corrompido que se adecua a intereses particulares de grupos y que nutren a las organizaciones delincuenciales; mientras que por otra parte desestiman a sus propias instituciones de acuerdo a lo que les parezca conveniente, teniendo como consecuencia que Estados Unidos sea uno de los países con mayores niveles de consumo de drogas.

La DEA caza a sus propios integrantes según EE.UU.

No se podría dejar pasar desapercibido que la persecución de Alex Saab se comienza desde el portal llamado ArmandoInfo.com a partir del año 2015 y para inicios del año 2018 Estados Unidos había contratado a un agente de la DEA, de nombre Eddy Pinto, para perseguir y secuestrar a Alex Saab por estar trabajando en función de los intereses del Gobierno y el pueblo venezolano.

Bajo estas perspectivas se cuestiona y se pone en duda la credibilidad del reciente documento presentado por la “justicia” norteamericana, ya que es bastante contradictorio que un agente de la DEA sea buscado por otro agente de la misma organización sin ningún elemento probatorio de acciones delictivas, ya que de acuerdo a las declaraciones del agente Eddy Pinto el caso de Alex Saab no estaba bien fundamentado.

México: SEIDO el brazo ejecutor de la DEA se equivoca

Por otra parte, es importante hacer mención a que la DEA ha tenido participación en diversas entidades gubernamentales en México, como es el caso de la Procuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), dónde aplican métodos de “inteligencia” para luchar contra la delincuencia organizada como se ha dicho. Sin embargo, en el año 2018 el subprocurador Alonso Isrrael Lira encabezó una serie de acusaciones a través de los medios de comunicación contra las empresas que proveían alimentos a Venezuela, para terminar haciendo un “acuerdo reparatorio” que se tradujo en un mecanismo de extorsión contra diversos empresarios que se encargaron de dicha tarea.

Estos mecanismos de extorsión se determinaron tiempo después cuando la misma subprocuraduría y la unidad de inteligencia financiera de México se vieron implicadas en corrupción por haber hecho un fulano acuerdo reparatorio contra Alex Saab de forma irregular, evidenciándose la extorsión de la cual fue víctima y que afectaba la comercialización de alimentos hacia Venezuela, siendo esta última práctica cónsona con las medidas coercitivas unilaterales, en confabulación con el extinto grupo de Lima.

“Sucedió un hecho insólito, los empresarios y personas físicas denunciadas, establecieron un acuerdo reparatorio con la Procuraduría General de la República que es ilegal… Nosotros ya denunciamos esto ante la Secretaría de la Función Pública y ante la Fiscalía”, afirmaba más tarde Santiago Nieto Castillo, titular de la UIF, en una entrevista.

Entre los sujetos que fueron producto de dicha extorsión figuraba Alex Saab, quien para su momento ya tenía inmunidad diplomática por tener estatus de enviado especial.

De acuerdo con lo que sostienen los fiscales en Estados Unidos de que Alex Saab fue supuesto colaborador de la DEA y que debía entregarse a la justicia norteamericana en el año 2019, existe una profunda discrepancia al ver que siendo el SEIDO una entidad bajo el tutelaje de la DEA, y de la cual según los fiscales es colaborador el diplomático venezolano, esta organización haya levantado investigaciones y haya extorsionado a quien de acuerdo a Estados Unidos era su aliado.

Estas contradicciones generan demasiadas interrogantes como las planteadas recientemente por el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Jorge Rodríguez, quien también cuestiona las afirmaciones de Estados Unidos por haber torturado brutalmente a quien presuntamente es su colaborador.

 

 

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