El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, recordó este domingo el atentado terrorista ocurrido un día como hoy de 1997 en el hotel Copacabana de la ciudad capital, auspiciado por Estados Unidos (EE.UU.), que cegó la vida del joven futbolista italiano Fabio Di Celmo.
«Recordamos a Fabio Di Celmo, joven italiano que hace 25 años fue víctima del terrorismo promovido por Estados Unidos contra Cuba. Estaba en la flor de la vida cuando el odio y la cruel intención de sembrar el terror en esta tierra, pusieron fin a sus proyectos», lamentó el mandatario en su cuenta de Twitter.
Recordamos a Fabio Di Celmo, joven italiano que hace 25 años fue víctima del terrorismo promovido por Estados Unidos contra #Cuba. Estaba en la flor de la vida cuando el odio y la cruel intención de sembrar el terror en esta tierra, pusieron fin a sus proyectos. #TenemosMemoria pic.twitter.com/OmdHZciMLN
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) September 4, 2022
En el mismo tono y red social se pronució también Roberto Morales Ojeda, miembro del Buró Político y Secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, quien ratificó la condena al terrorismo «donde quiera que ocurra y en cualquiera de sus manifestaciones».
A 25 años del asesinato del joven italiano Fabio Di Celmo, ratificamos #NoAlTerrorismo donde quiera que ocurra y en cualquiera de sus manifestaciones. #Cuba #CubaPorLaPaz pic.twitter.com/FT9B5ZpkPR
— Dr. Roberto Morales Ojeda (@DrRobertoMOjeda) September 4, 2022
Posada Carriles detrás del suceso
El 4 de septiembre de 1997, una bomba colocada en el hotel Copacabana truncó la vida del joven Di Celmo, según destaca la publicación Juventud Rebelde, en un artículo titulado «Fabio, aquel muchacho de nobleza honda».
La víctima tenía 32 años. El autor material del acto terrorista fue el salvadoreño Raúl Ernesto Cruz León, quien entró a Cuba el 31 de agosto, procedente de Guatemala, con la condición de turista, pero «en verdad era un mercenario extranjero que actuaba bajo las órdenes de la CIA y de la mafia que integraba la llamada Fundación Nacional Cubano Americana de Miami».
El terrorista Cruz León confesó poco después haber introducido en Cuba el explosivo tipo C-4 y los otros mecanismos que utilizó, y haber sido también el autor material directo de la colocación de los cuatro artefactos explosivos en un solo día en los hoteles Capri y Nacional, el 12 de julio. Por cada bomba recibiría un pago de 4.500 dólares, añade la fuente.
Agrega la publicación que detrás de todos los hechos estaba el veterano criminal, Luis Posada Carriles, quien se había entrenado como experto en demolición para la invasión de Playa Girón, en abril de 1961, y en cuyo expediente reposa la autoría intelectual de la voladura del avión de Cubana que despegó de Barbados el 6 de octubre de 1976, con 73 pasajeros a bordo.