La Corte Constitucional de la Federación de Rusia aprobó los acuerdos de adhesión de las repúblicas de Donetsk y Lugansk, y las regiones de Jersón y Zaporozhie, luego que el 30 de septiembre el presidente Vladímir Putin firmara los acuerdos de incorporación a la nación euroasiática, la más extensa del planeta.
En cuatro resoluciones separadas que se dieron a conocer este 2 de octubre, la Corte Constitucional dictaminó que cada uno de los cuatro acuerdos de incorporación «se corresponde con la Constitución de la Federación de Rusia», indica la agencia Sputnik.
Superado este trámite, la legislación rusa establece que habrá un período de transición —hasta el 1 de enero de 2026— para la plena anexión de los nuevos territorios en el sistema económico, financiero y legal de Rusia.
A todas las etnias que habitan en los nuevos territorios se les garantiza la preservación de sus respectivos idiomas y el derecho a la educación en lengua materna, dejando atrás la polémica ley que Ucrania aprobó en septiembre de 2017 que anteponía el uso del ucraniano en el proceso educativo frente a las lenguas de las minorías.
Dentro del plazo de 10 días después de consumada la incorporación, el presidente de Rusia nombrará a jefes interinos de las repúblicas de Donetsk y Lugansk, así como de las provincias de Jersón y Zaporozhie.
Próximas ratificaciones
Ahora los acuerdos deben ser ratificados por ambas cámaras del Parlamento ruso, la Duma del Estado y el Consejo de la Federación, respectivamente.
Las solicitudes del mandatario ruso para que se compruebe la constitucionalidad de los acuerdos de adhesión llegaron el 30 de septiembre a la Corte Constitucional, después de que Putin los firmara en una ceremonia oficial en el Kremlin.
La firma siguió a los referendos que estos territorios de Ucrania celebraron del 23 al 27 de septiembre, en la que mayoría de la población votó a favor de adherirse a Rusia. Según los datos de las autoridades electorales, el 93,11% de los electores en Zaporozhie y el 87,05% en Jersón eligieron salir de Ucrania y pasar a formar parte de Rusia, mientras que en Donetsk y Lugansk votaron a favor del ‘sí’ el 98,42% y el 99,23% de los electores, respectivamente.
