Corea del Norte anunció la deportación de Travis King, el soldado estadounidense que cruzó desde Corea del Sur en julio en busca de refugio.
Según la Agencia Telegráfica Central de Corea (KCNA), King, de 23 años, confesó haber ingresado ilegalmente debido a resentimientos por «maltrato inhumano y discriminación racial» en el ejército de Estados Unidos (EE.UU.)
Aunque las autoridades norcoreanas aún no especifican la fecha de deportación, King permaneció detenido en Corea del Norte desde que cruzó la línea de demarcación militar el 18 de julio.
Previamente, estuvo recluido en un centro de detención surcoreano por una disputa local y, tras su liberación, en lugar de regresar a Fort Bliss, Texas, reservó una visita a la zona desmilitarizada.
En un comunicado, KCNA detalló que King, un soldado de segunda clase, irrumpió deliberadamente en la zona de seguridad conjunta de Panmunjom.
El soldado admitió su entrada ilegal, expresando su desilusión con la «desigual» sociedad en el país norteamericano.
Fuentes del ejército de EE.UU. indicaron a CNN que no hay indicios de que esté tratando de desertar, y se espera que sea retirado del servicio una vez aterrice en suelo estadounidense.