Colombia y Bolivia elevarán ante la ONU-Viena una propuesta conjunta para la eliminación de la hoja de coca de la lista de sustancias prohibidas.
Ambos países quieren que se acepten sus usos tradicionales y medicinales para tratar dolores de estómago y mal de altura, en la masticación y en rituales religiosos liderados por grupos indígenas.
Se trata de una apuesta por desestigmatizar las conversaciones sobre el problema de las drogas, dijo en un comunicado la viceministra de asuntos multilaterales de Colombia, Laura Gil. La misma será presentada a mediados de marzo ante el organismo multilateral.
“Bolivia y Colombia consideran que es el momento de volver a poner este tema sobre la mesa”, dijo. “Sacar la hoja de coca -la hoja, no la cocaína, de la lista de sustancias prohibidas”.
El presidente colombiano Gustavo Petro ha sido enfático al decir que la guerra de Estados Unidos (EE.UU.) contra las drogas fracasó pues el objetivo se frenar el comercio nunca se cumplió y en cambio murieron más de un millón de personas y fue destruida la selva amazónica.
El mandatario insiste en un nuevo enfoque internacional, dirigido al programa de sustitución de cultivos de uso ilícito, y no en la erradicación forzosa de la hoja de coca.
Petro y el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken,discutieron intensificar el intercambio de inteligencia y otras medidas, pero siguen en desacuerdo en algunos temas como la extradición.
El presidente boliviano, Luis Arce, dijo en enero que su gobierno presionaría para que se eliminen las hojas de coca de la lista para que puedan comercializarse, luego de que su antecesor, Evo Morales, despenalizara la coca a nivel nacional.
