La frontera entre México y Estados Unidos (EE.UU.) es la que registra mayor cantidad de muertes en todo el mundo, así lo reseña este viernes la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
De acuerdo con el organismo multilateral, 1238 personas, entre ellos 51 niños menores de cinco años fallecieron en 2021, intentando cruzar las peligrosas rutas que conectan a ambos países.
El grupo demográfico más numeroso es el de las personas no identificadas. La tragedia en San Antonio, Texas, en la que 53 personas murieron hacinadas dentro de un camión por la intensa ola de calor, ascendió a 493 la cifra de víctimas fatales en lo que va de año.
Uno de los autores del informe de la OIM, Edwin Viales, advirtió que las muertes en la frontera sur de Estados Unidos son «significativamente más altas que en cualquier otro año», incluso antes de la pandemia de Covid-19, y eso pese a la dificultad para recabar datos.
No obstante, el repunte de los viajes continúa, especialmente desde distintos países centroamericanos, la crisis se ve empujada por la precariedad económica con las que se inician las rutas, muchos de los ciudadanos quedan a la deriva por problemas económicos, sin alimentos e hidratación.
Tragedia de San Antonio
El hallazgo de 48 personas sin vida y otras 16 moribundas dentro del tráiler de un camión en el estado de Texas a inicios de semana, conmocionó a la opinión pública.
Con las horas y los traslados a los centros de salud la cifra se elevó a 53 muertos.
El suceso puso nuevamente sobre la mesa el debate de la crisis migratoria, pero aún no se han articulado acciones concretas para combatir la problemática.
Este supone el caso más mortífero de tráfico de personas en la historia reciente de EE.UU., y afecta también a varias naciones ya que al menos 27 de los fallecidos eran mexicanos, 14 hondureños, siete guatemaltecos y dos de El Salvador.
